La consejera de Salud y Consumo, Catalina García, ha afirmado que el objetivo del Gobierno andaluz «es conservar el mayor número posible» de los 12.000 sanitarios de refuerzo Covid cuyos contratos finalizan a final de año, porque «tenemos encima de la mesa muchos proyectos que tendrán que avanzar precisamente con los profesionales», pero, señala, «estamos esperando ver con la Consejería de Hacienda los presupuestos de la Junta».
Así lo ha indicado la consejera en una entrevista a Europa Press, en la que ha apuntado que cuando llegaron al Gobierno las necesidades de personal dentro del sistema sanitario «eran estructurales, con un déficit brutal, que nos obligó con la pandemia a hacer un refuerzo extraordinario». Pero ahora la situación en Andalucía «ha cambiado ostensiblemente, con una hospitalización ya casi residual, tanto en UCI como convencional, y también el sistema se tiene que adaptar a la nueva situación».
Y «tendremos que adaptarnos a las circunstancias», ha apuntado, para añadir que «ojalá no nos enfrentemos a una recesión económica, que es lo que dicen a nivel nacional, porque eso sería un verdadero problema para todos, ya que habría familias a las que ayudar de muchas maneras, no solo desde el punto de vista sanitario». «Esperemos que el Gobierno tenga razón y crezcamos un 4% y un 2% el año que viene porque eso cambiaría mucho la situación y las circunstancias de las decisiones que tome el Gobierno andaluz en cualquier consejería».
Además, ha recordado el «compromiso» del Gobierno y del presidente, Juanma Moreno, con consejerías que para él «son prioritarias, como Salud, y eso se demuestra en presupuesto». En este sentido, ha destacado que desde 2018 «son 2.000 millones de euros más los que tiene la sanidad andaluza, pasando de un 6,1 al 7% del PIB, que es lo que siempre habíamos pedido todos y en el que ya estamos», y aunque reconoce que «no es suficiente», señala que «tenemos que ver de dónde venimos y en dónde estamos, que es lo que le pedimos a la gente».
«En Andalucía se hacen contratos como mínimo de seis meses y a los médicos en zonas de difícil cobertura, de un año; se han mejorado sus condiciones laborales cobrando un 34% más por las guardias y un 11% más por las noches y festivos; en el último acuerdo con los sindicatos, aprobado por unanimidad, tienen carrera profesional todas las categorías, una petición del año 2006 que estaba aparcada; y nos hemos convertido en las terceras enfermeras mejor pagadas de España», ha resaltado la titular de Salud.
Por tanto, en «tres años y medio además de una pandemia se han hecho muchas cosas» y la situación de Andalucía «ha cambiado para ser una comunidad acogedora y que los profesionales no se quieran ir, vengan algunos que se han ido y se queden todos los que estamos formando ahora».
Ha destacado, igualmente, que el Plan de Verano --que cuenta con unos 30.000 contratos, entre los que se incluyen los 12.000 de refuerzo Covid--, «está funcionando muy bien», destacando que, además, tenemos funcionando las consultas de acogida en los centros de primaria y tenemos los centros de urgencias en primaria y en hospitales, con lo cual la asistencia está totalmente garantizada".
Sobre las consultas de acogida desarrolladas por las enfermeras en los centros de salud, García ha destacado que «sirven para liberar al médico de familia y que tenga más tiempo», toda vez que ha añadido que del «millón de consultas realizadas se han podido resolver el 52%», lo que, a su juicio, demuestra que «la demanda del usuario no era dirigida totalmente al médico».
Ha defendido también que «funcionan con protocolos que son aprobados por las sociedades científicas», y no «queremos que sean vistas como invasión de competencias» porque médicos y enfermeras «tienen sus competencias muy bien establecidas», ha manifestado. «Lo que tenemos es que avanzar en ese sistema que está funcionando», subraya García, quien insiste en que «funcionan con protocolos aprobados».
Además, «si estás consultas siguen funcionando bien y se siguen ampliando van a redirigir mucha de la demanda que no tienen que ir para los médicos, y si en pleno verano estamos en 3,77 y 4,17 de media en Andalucía para que seas atendido --por tu médico--, para llegar a las 48 horas nos queda muy poquito».
En este sentido, ha recordado que cuando llegaron «una de las primeras cosas que hicimos fue permitir que los profesionales gestionaran sus agenda para que la asistencia a las personas no fuera de cinco minutos», un extremo, apunta, «que se nos ha olvidado». Con lo cual, «las personas que son atendidas al día dependen de las agendas que ellos programan y con el tiempo que ello estiman que tienen que atender a esas personas».
«Ahí ya tenemos algo que nos pone en una tesitura más complicada para llegar a esas 48 horas, porque dimos mucha libertad a los profesionales, y estamos de acuerdo en esa libertad, porque mejor que el médico y la enfermera de familia que atiende a su cupo nadie va a saber», ha asegurado.
Ha añadido que «partimos de ahí y ahora ya tenemos una herramienta nueva que se llama continuidad asistencial, que los médicos llevaban pidiendo 20 años y era el momento clave porque tenemos un déficit de profesionales no cubierto de hace mucho años, y nuestra misión ahora tiene que ser programar para los años siguientes pero solucionando los problemas de hoy». «La continuidad asistencial será un herramienta muy importante de cara al otoño para que la demora que se va a producir por la alta frecuentación podamos reorganizarla en cada centro de salud con los mismo profesionales».
Cuestionada sobre otros retos en la atención primaria, García ha aludido a la telemedicina, y ha destacado que ya existe «un centro trabajando en Macarena, que tiene casi todas las especialidades incorporadas y que es de apoyo a primaria», de tal manera que este nivel asistencial «tenga capacidad de resolución y consulta ante un paciente crónico y tenga una duda en su tratamiento». «Es clave y los vamos a hacer en todas las provincias; descongestionará primaria y hospitales si se trabaja de forma coordinada».
Además, ha recordado que trabajan en un programa de atención a la cronicidad, que «se está pilotando en Huelva y Jaén para poder dimensionarlo a nivel de Andalucía». «En equipos muy trabajados van a hacer una atención muy especial a la cronicidad, no solo de ocho a tres sino especialmente cuando se cierran los centros de salud», porque esa personas mayores «viajan por el sistema sin encontrar solución y lo que no queremos es que viajen, sino que la atención llegue directamente a sus domicilios».
La primaria "tiene mucho que decir" en salud mental
Y finalmente, ha resaltado que están trabajando en un programa muy importante de salud mental, en el que «la primaria tiene mucho que decir». Así, ha destacado el aumento de profesionales de salud mental en primaria, «en esta legislatura 243 más, aunque no es nada para el déficit estructural», para añadir que quieren tener psicólogos clínicos en los centros de salud, «especialmente para la prevención y detección precoz, y para que trabajen de la mano de enfermeras referentes escolares y la comunidad educativa».
La salud mental «siempre ha sido un problema pero durante el Covid ha sido un problema mayor»; además, «no habíamos sido capaces de detectarlo en jóvenes y adolescentes», que «se le escapa a las familias, no es detectado en los colegios y tampoco en el sistema», por lo que «estamos obligados a ser capaces de detectar a tiempo un tanto por ciento elevado». «Tenemos unas cifras pero la realidad va mucho más allá», ha concluido.
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