Gema Aguilera Queralta, Edurne Barranca Aran, Laura Fernandez Moreno, Iñaki Llopart i Vidal, Sandra Pons Perelló, Antonio Morlà Rosselló, Karen A. Fernández García, Rebeca H. Vaquero, Jesús Garcia Martínez y Yassir Torres Figueira.

La Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de Clínica Juaneda ha puesto en marcha un Plan de Humanización para reducir aún más el impacto en el plano emocional y psicológico del paso por este servicio, tanto a los pacientes como a sus allegados que los acompañan.

Unas de las primeras acciones de este Plan de Humanización es la configuración de una Guía de Atención a los Familiares, con la que se pretende dar a conocer lo que es la UCI y expresar que el ingreso del paciente es un paso más de su proceso hacia la curación. La UCI de la Clínica Juaneda posee 10 camas. Se encuentra situada en la planta -2 del hospital, aunque con luz natural. Cuenta con una sala de estar donde los allegados aguardan, tanto para recibir información médica, como para visitar a su familiar.

El cuadro médico está integrado por los médicos intensivistas Dr. Iñaki Llopart i Vidal, Jefe de Servicio; Dra. Karen A. Fernández García, Dr. Alfredo A. Garrido Polo, Dra. Rebeca H. Vaquero, Dr. Josu López Líbano y Dr. Juan Gabriel Márquez Rodríguez. Junto con ellos, trabaja codo con codo el equipo de enfermeros/as, cuyo supervisor es Antonio Morlà Rosselló, técnicos/as auxiliares, celadores/as, fisioterapeutas y personal de limpieza, todos muy implicados en atención continuada y de calidad al paciente ingresado.

Los profesionales de la UCI de Clínica Juaneda son, además de quienes velan por la curación de los pacientes en una fase crítica de su enfermedad, los que se encargan del tratamiento y vigilancia estrecha de aquellos que acaban de ser sometidos a una cirugía. La guía informa que los allegados de los pacientes ingresados en la UCI pueden visitarlos en un horario de 13:00 a 19:00 horas. Este horario de visita y permanencia puede ser flexibilizado por necesidades puntuales del paciente o de la dinámica de la unidad.

En cualquier caso, si las personas allegadas al enfermo necesitan flexibilizar este horario podrán acordarlo con el equipo asistencial responsable del paciente. Se recomienda, en principio, que no sean más de dos los familiares presentes por habitación. En aras, precisamente de la humanización de la atención, la Guía explica que podrá entrar algún familiar más, consultando antes al equipo asistencial. También podrán intercambiarse los familiares durante el horario de visita, haciendo ese cambio fuera de la unidad.

La Guía aporta también información útil, como la recomendación de que para prevenir infecciones al entrar en la UCI es importante recordar lavarse las manos y/o aplicarse una solución hidroalcohólica, antes y después de la visita. Si su familiar se encuentra en situación de aislamiento, el personal le informará de las medidas especiales a tomar. El uso del teléfono se hará de forma responsable para preservar el descanso de los pacientes.

En ningún caso —se informa también en esta guía— está permitida la realización de fotografías y/o videos, con el fin de preservar la intimidad de cada uno de los enfermos ingresados en la unidad, de acuerdo con las disposiciones legales vigentes. La entrada de menores en la UCI no está prohibida, aunque no se recomienda menores de 12 años. La decisión de entrada será de sus padres o tutores legales. El menor deberá estar acompañado de un adulto en todo momento.

La Guía explica a los pacientes y especialmente a sus allegados que la información asistencial se dará diariamente entre las 13.00 y las 15.00 horas, aunque este horario podría verse alterado por necesidades puntuales del enfermo o de la dinámica de la unidad.

La información médica será proporcionada por parte del médico responsable y por el médico de guardia los días festivos y fines de semana. El equipo de enfermería y auxiliares informará sobre los cuidados y las necesidades del paciente. La vía telefónica no se usará para informar de la evolución (las excepciones se valorarán individualmente) para garantizar la confidencialidad del paciente. Sí se avisará por teléfono de producirse un cambio importante o ante la necesidad de autorizar algún procedimiento.

Desde la UCI de Clínica Juaneda se anima a los familiares a sentirse libres de preguntar todo lo que consideren oportuno. Se ruega que, siempre que sea posible, sean las mismas personas quienes reciban la información (preferiblemente, familiares cercanos).

Para los pacientes y sus familiares de habla extranjera, en la Clínica Juaneda se dispone de un equipo de intérpretes en muy variados idiomas, que serán los encargados de acompañar, facilitar y posibilitar la comunicación entre el personal, el paciente y la familia. Los intérpretes se ocupan también de los trámites administrativos con los seguros de viaje o privados extranjeros para facilitar las gestiones burocráticas. El intérprete estará presente en la información asistencial que se facilite desde la UCI, que se dará diariamente.

En cada habitación el paciente dispone de un equipo asistencial compuesto de un monitor de cabecera, que registra de forma continua los signos vitales como tensión arterial, frecuencia cardiaca y frecuencia respiratoria.

Lo que la familia debe saber sobre aparatos y procedimientos

También hay bombas de infusión, un ventilador, máquina de diálisis y monitores de sedación, un aparato de medición de presión intracraneal, un colector para medir cantidad de orina y bombas para la alimentación a través de la sonda nasogástrica.

Cada habitación de la Unidad de Cuidados Intensivos está dotada del material específico necesario para garantizar la vigilancia y el tratamiento adecuado. Cada paciente puede necesitar un dispositivo diferente dependiendo de su enfermedad.Estos aparatos disponen de unas alarmas sonoras de todas las variaciones que puedan producirse, no siempre relacionadas con situaciones de urgencia o gravedad, por lo que oírlas no debe alarmar a la familia. El personal monitoriza continuamente estas alarmas.

Durante un ingreso en UCI son frecuentes técnicas como la colocación de catéteres en venas periféricas o centrales, necesarias para la administración de sueros y medicamentos, monitorización y extracción de analíticas, explica la Guía para pacientes y familiares.

Es frecuente que se le coloque al paciente una sonda uretral para el control de la diuresis y, en algunas ocasiones, una sonda rectal para la recogida de heces cuando aparezcan episodios de diarrea, elementos que la familia debe conocer para su información y tranquilidad.

También son frecuentes los drenajes (tubos en tórax, cabeza, abdomen) para recoger líquidos o aire y extraerlos al exterior. Son frecuentes tras las cirugías y puede que alguno de ellos haga ruido, lo que no debe asustar a quienes acompañan al enfermo.

La intubación —otra maniobra frecuente en la UCI— es la colocación de un tubo por la boca, hasta los pulmones, con el objetivo de ayudar al paciente a respirar. El paciente ha de estar dormido, para lo que se administrarán fármacos sedantes. Tras la intubación, el tubo colocado en la vía aérea se conectará a un ventilador y se mantendrá la medicación sedante para que el paciente esté confortable. La intubación y conexión al ventilador suele durar varios días, dependiendo de la evolución de cada caso.

Es muy frecuente que los pacientes intubados presenten gran cantidad de secreciones y sialorrea, que el personal se encargará de aspirar. No hay que alarmarse si sucede eso a un familiar. En el proceso de aspiración, sedación y la analgesia le ayudarán a no sentir dolor.

El descenso de la sedación para despertar al paciente suele durar varios días y es probable y normal que algunos despierten con tendencia a la agitación (que se resolverá). Es importante recordar que mientras el paciente esté intubado no podrá hablar.

La traqueotomía es la colocación de un pequeño tubo directamente en la tráquea para ayudar a respirar. El médico le planteará la necesidad de realizar dicha técnica si su familiar lleva muchos días intubado y necesita seguir conectado al ventilador. La traqueotomía permitirá al paciente estar más confortable y evitará posibles infecciones. Es importante recordar que, generalmente, mientras lleve la cánula, el paciente no podrá hablar.

La técnica del decúbito prono consiste en colocar al paciente boca abajo para mejorar la ventilación de los pulmones. En esta posición es frecuente que el paciente presente hinchazón a nivel de la cara y los párpados, pero será algo temporal. Según la enfermedad, su familiar puede precisar estar en situación de aislamiento. El equipo asistencial de la Unidad de Cuidados Intensivos le indicará qué medidas debe tomar para su propia protección y la de otros pacientes, tal como informa también la Guía.

Durante su estancia, su familiar puede ser trasladado para realizarle pruebas diagnósticas, a quirófano, a otra UCI o planta de hospitalización. En estos casos se les informará con anterioridad siempre que sea posible, presencial o telefónicamente. Para la realización de determinadas pruebas diagnósticas o tratamientos previamente descritos, se solicitará a la familia su consentimiento informado y por escrito si su familiar no estuviese en condiciones de realizarlo por sí mismo.

Los aparatos de la imagen:
1.Monitor de constantes vitales.
2.Bombas de infusión de medicación.
3.Bomba de infusión de nutrición.
4.Monitor del índice biespectral (BIS®) para vigilancia del nivel de hipnosis de los pacientes bajo sedación o anestesia.
5.Sistema de aspiración de secreciones.

El personal de la UCI verá de ubicar en la habitación los objetos religiosos que se soliciten, así como de proporcionarle asistencia religiosa si lo solicitan, peticiones que se pueden formular también en Información en el servicio de Atención al Paciente.

Dudas frecuentes y consejos útiles de los familiares

—¿Puedo tocar a mi familiar ingresado en la UCI?
—Siempre que quiera podrá tocar a su familiar, darle la mano o proporcionarle alguna otra muestra de cariño. Deberá tener en cuenta que su familiar tendrá cables o aparatos con los que habrá de tener cuidado.

—¿Puedo hablarle? ¿Cómo me comunico?
—Si su familiar se encuentra intubado y despierto puede ser difícil la comunicación, limitándose las preguntas a las que pueda responder con un sí o un no y con la cabeza. Si lleva mascarilla de ventilación no invasiva es preferible no hablar. Si su familiar se encuentra intubado y dormido no le oirá; sin embargo, usted puede hablarle.

—¿Puedo traerle algo para que se entretenga?
—Si su familiar está despierto y estable podrá traerle libros, periódicos o revistas. También podrá usar de forma responsable aparatos electrónicos con auriculares (como ordenadores portátiles, teléfono móvil o tabletas).

—¿Qué puedo hacer para sentirme mejor?
—Es normal que durante el ingreso de su familiar usted presente sentimientos de shock (no saber qué hacer ni cómo reaccionar), negación (creer que lo que pasa no es verdad), enfado, preocupación, esperanza, culpa, ansiedad y miedo. El equipo de profesionales de la UCI de Clínica Juaneda aconseja: Respete sus propias horas de descanso y sueño. Aliméntese de forma equilibrada y tranquila. Exprese sus dudas, sentimientos y necesidades: Pregunte siempre lo que quiera saber, sin miedo. Además, verbalizar las emociones las alivia y ayuda a encontrar la solución a diferentes problemas. Al final, desde la UCI le pedirán que valore la estancia de su familiar mediante un cuestionario que ayudará a mejorar la atención de futuros pacientes y familiares y su experiencia.