Luis García Plaza confía en que el Mallorca «siga fuerte en casa», donde enlaza tres victorias seguidas entre Liga y Copa. | Efe

TW
0

Son Moix también juega. El estadio bermellón, la mejor plataforma que ha encontrado el Mallorca en su salida a la superficie, vuelve a reclamar su turno de palabra. A la hora de la comida y con el homenaje a Galarreta como telón de fondo —tanto en el césped como en las gradas— el equipo bermellón intentará seguirá tirando de la cuerda a la que se ha agarrado para volver a distanciarse del fuego que sale del fondo de la clasificación. La escuadra de Luis García Plaza encadena ya tres victorias consecutivas en el salón de su casa entre Liga y Copa y en lo que va de 2022 solo presenta una mancha: la del partido que abría el año contra el Barça.

«Ojalá tengamos la fortuna de seguir fuertes en casa», desea el entrenador madrileño. «Necesitamos a la afición, que venga al campo toda la que pueda porque hemos notado mucho ese apoyo. Ojalá sea así hasta el final de la Liga, que sumemos los tres puntos, aunque sabemos que no será fácil». Contra el Valencia, que viaja a Palma en llamas y sin dejar de mirar de reojo a la Copa, Luis García Plaza espera que su Mallorca siga siendo ese equipo solvente y competitivo de las últimas jornadas. «Tenemos que ser nosotros mismos más que nunca y necesitamos a nuestra gente. Es un rival que presiona mucho, un gran equipo con Guedes, Maxi Gómez o Carlos Soler, que siempre aspira a estar entre los mejores», recuerda el técnico para mantener elevada la guardia.

La lesión de Galarreta, que puede ser cubierta por Antonio Sánchez o Rodrigo Battaglia —el técnico también amplía el abanico a Sedlar o, incluso, Dani Rodríguez— ha supuesto una motivación añadida para la plantilla y el cuerpo técnico, que quieren brindarle una gran función al de Eibar. «Gala representa muchos valores», asegura Luis García. «Transmite bondad y no lo invento ahora. Es un chico diez, por cómo entrena y por cómo trabaja para conseguir los objetivos. Es una lesión que va a superar, seguro. Ha sido un palo y ahora otra gente debe dar un paso al frente». El técnico también arropa de manera especial a Brian Oliván, que vuelve a estar a su disposición después de cumplir un partido de sanción. Y lo hace a raíz de que esta semana se desvelara que podría tener ya un acuerdo con el Espanyol para la temporada que viene. «¿Es oficial? Como no lo es no opino nada. Brian es mi jugador, aunque sé que su renovación está complicada porque así lo dijo Pablo (Ortells). Estoy supercontento con él porque siempre se lo deja todo por el equipo», subraya.

En la esquina valencianista, su entrenador, José Bordalás, afronta el partido contra el Mallorca con «la obligación» de obtener «un buen resultado» y de «sumar puntos» para «no tener dificultades». «Es un encuentro muy importante y son tres puntos para sumar y estar tranquilos en este momento decisivo. Hemos tenido una mala racha y tenemos que cambiarla cuanto antes. Con esa intención vamos a Mallorca. Estamos con el ánimo por las nubes, con una mentalidad ambiciosa y ganadora», afirmaba el alicantino en Paterna. Del Mallorca, Bordalás subraya sus bondades y las «diferentes fases» por las que ha pasado. «Ha recuperado buenas sensaciones y la llegada de Muriqi les ha dado presencia y solvencia», avisa el preparador del Valencia.