Pedro Bigas y Kevin García posan en Son Bibiloni.

TW
3

Irrumpieron en la pasarela del profesionalismo por accidente. Casi de casualidad. Como dos recursos de urgencia. Sin embargo, a base de humildad, trabajo y toneladas de sudor acumulado en silencio en las catacumbas de la Ciudad Deportiva, Pedro Bigas (Palma, 1990) y Kevin García (Palma, 1989) comienzan a devorar kilómetros en Primera División. La titularidad de ambos en el Santiago Bernabéu confirman los progresos de dos futbolistas llamados a echar raíces en el Real Mallorca. Su complicidad va más allá de las paredes del vestuario. Vecinos de Calvià -Pedro reside en Santa Ponça, en la Costa de la Calma, y Kevin en Peguera-, en ocasiones llegan juntos a Son Bibiloni y ni siquiera su duelo por el lateral izquierdo agrieta una relación sembrada en juveniles.

Muestra de su amistad es el agradecimiento de Bigas a su compañero por la lesión que sufrió a comienzos de la pasada temporada y que le abrió las puertas del primer equipo. «Gracias por lesionarte que hasta ahora no te había dicho nada...», le apunta entre risas. Ultima Hora reunió a los canteranos que más fuerte están pisando en las últimas campañas. Ellos son el futuro.

-Representan la nueva hornada de mallorquines en el primer equipo, ¿qué supone para dos canteranos?

- Kevin García: Un orgullo para ambos llegar al profesionalismo desde la cantera. Llevo tres años en el primer equipo y estoy agradecido por la confianza.

- Pedro Bigas: Muy satisfecho. Es difícil, pero a base de esfuerzo y trabajo diario se consigue. Los canteranos deben pensar que no es imposible. Que pueden dar el salto. Nosotros dos estamos gozando de esta oportunidad y la estamos aprovechando.

-Desde fuera parece que a los jugadores de la casa se les mira con lupa. ¿Están de acuerdo con esa sensación?

- PB: Parece que tiene que ser más complicado porque son muchos los futbolistas que empiezan y pocos los que llegan. Pero a base de trabajo, esfuerzo y un poco de suerte, cualquiera puede tener su oportunidad. No creo que sea porque se fijen más o menos en si eres o no canterano.

- KG: La clave está en el trabajo, el sacrificio diario. Hay que luchar y tener esa pizca de suerte necesaria para estar en el momento oportuno y aprovechar las ocasiones.

-Jugadores como Ramis o Víctor optaron por las cesiones para buscar minutos. En su caso, siguen en el vestuario del Mallorca desde el primer día.

- KG: A ellos la experiencia les sirvió para mejorar, pero la situación es diferente. Ahora tenemos la suerte de estar en el primer equipo y trabajamos para mantenernos, que es lo verdaderamente difícil.

- PB: Tuvieron que salir del Mallorca y seguro que les sirvió para relanzar su carrera. En mi caso, firmaría por quedarme aquí toda mi carrera deportiva.

-Analizando la temporada, se aprecian unos altibajos notables en el rendimiento. ¿A qué achacan esta irregularidad?

- PB: Empezamos muy bien, pero teníamos que estar preparados porque nunca sabes qué puede pasar. Después llegó una pésima racha y ahora estamos peleando para intentar salir de esta situación. Parece que hemos encontrado el camino.

- KG: Es cierto que el inicio fue muy bueno. Eramos un equipo agresivo y sabíamos a lo que jugábamos. Pero después llegó una mala racha, un problema más mental que físico o futbolístico. Estábamos mentalmente bloqueados. Desde la llegada de Gregorio Manzano hemos logrado mejorar sobre todo en el aspecto anímico.

-¿Qué tiene Gregorio Manzano que no tuviera Joaquín Caparrós?

- KG: El míster llegó y nos dijo principalmente que no jugáramos atenazados, que somos unos privilegiados y que el fútbol es para ser feliz. Hay que soltarse y hacer lo que sabemos sin miedo a perder el balón. En este sentido, el míster nos ha dado confianza.

- PB: No creo que la culpa fuera del entrenador, pero es cierto que nos habíamos metido en una rutina muy mala. No salían las cosas, no eramos capaces de resolver la situación. No sabíamos qué hacer. Jugábamos bien y perdíamos; jugábamos mal y también. Necesitábamos algo que cambiara la dinámica. Pero no creo que fuera por Caparrós. Es verdad que ahora Manzano ha sabido girar los malos resultados, los pensamientos negativos.

-Es como si el equipo se creyera peor de lo que era...

- PB: No sé si peores, pero la situación es que salías al campo con la sensación de que ibas a encajar un gol y que tendrías que remontar. El trabajo de Manzano nos ha ayudado a olvidar todo eso. A pensar en disfrutar, como dice Kevin. En jugar y confiar en nosotros mismos. Se ha producido un cambio y los buenos resultados están llegando.

-¿Qué pensaron cuando conocieron la llegada de Antonio López en verano y la de Luna en enero?

- PB: En mi caso, he renovado este año y comprendí que era muy difícil que apostaran por mí como titular. Además, sabía que habría otros laterales como Kevin. Cuando llegó Luna estábamos en una mala dinámica y había que probar algo, buscar soluciones. Se trataba de luchar y de trabajar para sumar minutos y jugar minutos.

- KG: La llegada de Antonio me pareció genial porque es un jugador experimentado del que los jóvenes podemos aprender mucho. Sabía que lo tendría complicado porque iba a ser un futbolista importante para el míster, pero se lesionó y Caparrós entendió que hacía falta otro lateral. Luna, en este caso. Había que respetarlo y tratar de ponérselo difícil. Nada más.

-En el caso de Kevin, además, hizo dos grandes partidos ante Betis y Atlético y sin embargo no tuvo continuidad...

- KG: Se hace duro ver que no juegas cuando ves que están saliendo las cosas y que te encuentras bien físicamente, pero tampoco podía hacer nada más.

-Sea como sea, el premio le llega ahora...

- KG: Manzano creyó conveniente que en Madrid jugara la misma defensa que contra el Sevilla y le agradezco mucho esa confianza. Además, pese a la derrota el equipo jugó bien y dejó buena imagen. No esperaba jugar en el Bernabéu porque el míster tampoco da muchas pistas. De todas formas estaba mentalizado y preparado para jugar.

-Cuando han jugado juntos al equipo no le ha ido mal

- PB: La verdad es que los resultados han acompañado, pero tampoco creo que sea por nosotros (risas). Nos entendemos muy bien, como con el resto de compañeros.

-La polivalencia de Bigas y su capacidad para adaptarse a cualquier exigencia le beneficia

- PB: Me beneficia y me perjudica al mismo tiempo. Me beneficia porque sabes que tienes la opción de que si alguien se lesiona o está sancionado puedes entrar en su puesto. Pero también me perjudica porque no eres el titular, sino el suplente de todos. En resumen, es bueno si el entrenador está contigo y te hace jugar siempre, sea donde sea y mal cuando es al revés. Mi posición en categorías inferiores siempre fue la de pivote pero como central me encuentro muy cómodo y donde me ponga el entrenador trato de aportar lo máximo.

-Volviendo a la situación del club, en cuanto se reanude la Liga vendrán casi de golpe tres rivales directos...

- KG: Son los partidos más importantes que nos esperan. Son encuentros que hay que ganar, sobre todo los de casa contra Deportivo y Celta. Y contra el Zaragoza también habría que aprovechar que atraviesan por una mala racha.

- PB: Estos son nuestros partidos y hay que ganarlos. Hay que arrebatarles los puntos a los rivales directos y pensar en una posible sorpresa en el Camp Nou. Eso nunca hay que descartarlo. Hay que salir a ganar.

-De los equipos que están ahí abajo, ¿cuáles creen que acabarán cayendo?

- PB: De momento la clasificación lo dice todo, pero a excepción de Osasuna y Granada tenemos que jugar contra todos ellos y casi siempre en casa. Creo que nosotros lo tenemos mejor que casi todos para poder salvarnos.

-Para los futbolistas jóvenes que habitan en la plantilla, ¿qué papel juegan los veteranos?

- KG: Aconsejan a todo el vestuario. Han pasado por muchas situaciones y son piezas básicas para el equipo. Nos animan y arropan y lo cierto es que se agradece.

- PB: A mí me sorprendió mucho la tranquilidad con la que se tomaban ellos la situación cuando pasábamos por aquella mala racha. Yo no sabía qué hacer y ellos, en cambio, nos recordaban que en cuanto ganáramos dos partidos nos recuperaríamos. Y así ha sido. Ahora vemos las cosas de otra manera, con otra ilusión de que lleguen los partidos, pensando en ganar. Hay que tomar ejemplo de ellos.

-Un elemento diferencial ahora mismo es Giovani dos Santos...

- PB: Es un jugador importantísimo para nosotros. Basta con verlo. Tiene otro ritmo, otra marcha puesta, una visión diferente. Esta haciendo unos partidazos y a partir de ahora va a ser más importante todavía.

- KG: Sabía que era muy bueno, pero me ha sorprendido. Va sobrado, tiene una calidad increíble, un disparo letal... Es determinante y todos sabemos que en cualquier momento la puede liar.

-Regresando a la crisis que sufrió el equipo, el momento más duro se vivió después de perder contra el Getafe con las protestas de la afición. ¿Cómo lo vivieron?

- PB: Yo siempre me intento poner en la piel de los aficionados, pero también me gustaría que ellos a veces hicieran lo mismo. No perdemos porque nos guste, no queremos hacerlo. En cualquier caso es normal que estuvieran molestos y cansados de vernos perder. Y también que se quejaran.

-¿Les sorprendió que una afición normalmente tranquila se expresara de esa manera?

- KG: Es raro. Pero igual que una entrada para vernos tienen todo el derecho a protestar, aunque nosotros también sufrimos. De todas formas también debemos agradecer que el día del Granada nos recibieran en el aeropuerto. Nos vino muy bien aquello. Nos dio muchos ánimos.

-El gol de Hemed en Los Cármenes es el punto de inflexión de la temporada...

- KG: Sin duda. Ese gol nos dio la vida e hizo que contra el Sevilla y el Real Madrid diéramos un paso al frente. En el Santiago Bernabéu demostramos que fuimos a más y desde entonces, por mucho que nos goleara el Madrid, nos estamos superando partido a partido.