Aina Bauzá posa con la embarcación recién construida en Polonia para poder competir en la Mini Transat.

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Años de dedicación y preparación rumbo a un sueño empiezan a coger forma para Aina Bauzá. La regatista del Club de Vela del Port d’Andratx ya palma con sus manos el Redò, nombre con el que ha bautizado a la embarcación con la que preparará y espera poder tomar la salida en la Mini Transat 2023. Fabricado en Polonia, es un barco de serie y de nuevo generación, preparado para optimizar mejor la velocidad y soportar la exigencia de una regata que atraviesa el Atlántico, y en la que Aina pretende ser la primera balear en inscribir su nombre en la historia de una de las citas de referencia de la vela transoceánica.

La propia deportista se encargó de ir a recogerlo y trasladarlo por carretera hasta Barcelona, donde tendrá su base, aunque la intención es poder traerlo en breve hasta Mallorca. Gracias a una serie de «pequeños grandes apoyos», en palabras de Bauzá, el proyecto Mini Transat 2023 ya tiene un argumento más para seguir adelante. Balearic Helicopters, Alize Boats o Sailongreen son algunas de las empresas que han brindado su soporte a la regatista, que encara una fase decisiva hacia su objetivo vital.

Requisitos

Para poder competir en la Mini Transat 2023, Aina Bauzà y el Redò tendrán que completar una serie de requisitos a modo de rodaje. Nada menos que 1.500 millas en regata y otras 1.000 en solitario, todas con el nuevo barco, serán las que deberá acreditar ante la Mini Transat para poder tomar la salida. Su experiencia a nivel náutico está de sobra contrastada, pero antes del mes de noviembre de 2022, Aina Bauzá deberá recorrer y certificar esas distancias. Una buena manera de adaptarse a la embarcación con la que aspira a atravesar el Atántico y escribir una historia inédita en el devenir de la vela oceánica balear y española, uniendo las dos orillas del Atlántico.