La plantilla del Mallorca inició este lunes la pretemporada con una sesión de entrenamiento vespertina en la Ciudad Deportiva Antonio Asensio. Algunos aficionados encendieron bengalas durante la sesión preparatoria. | Youtube Ultima Hora

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En el primer día de trabajo de la plantilla del Real Mallorca, su consejero delegado, Maheta Molango, aprovechó para pasar revista a los diferentes aspectos que marcan la actividad rojilla en los primeros pasos del curso 2017-18.

Molango se mostró satisfecho con las incorporaciones: «Las cosas están yendo como queríamos, que era tener al máximo número posible de jugadores en el primer día de trabajo. Hay que tener paciencia porque hay algunos casos de futbolistas que piensan que entran en Segunda División y debemos estar atentos», analiza el consejero delegado sobre unas incorporaciones que eran «primeras opciones» de la lista. «Ilusiona que la gente quiera venir, es algo que da tranquilidad. Bajamos y las cosas se hicieron mal, pero en el mundo del fútbol se percibe que hay seriedad», apunta.

Cerró el pasado curso apuntando a un mal aún por diagnosticar en el Real Mallorca y considera que las caras nuevas dejan entrever el propósito de enmienda. «Faltó carácter y hemos fichado gente del perfil de Grima, capitán del Badalona; Reina, capitán del Nàstic o Xisco, también capitán, porque queremos corregir ese defecto del año pasado con gente de la categoría y que sepa de qué va esto».

Molango apunta a «un máximo de dos tres fichajes» si siguen los cuatro futbolistas con contrato. «Siguen aquí y a ver si somos capaces de que sigan hasta el final», apunta. «Hemos hecho un esfuerzo importante y la intención es intentar que el equipo compita arriba y trate de subir. La idea es hacer lo necesario para que se queden», incide dejando claro que «son jugadores cotizados y entendemos lo que pasa por sus cabezas, pero hemos bajado, toca remar juntos y hay que traer ofertas para que valga la pena».

En cuanto a la afición, entiende que «le debemos una o más de una». «Sabemos lo que hay y es normal que estén tristes, así que nos toca trabajar para devolverles la sonrisa, solo es posible con resultados y trabajando», dice.