Brandon, Chapi Ferrer, Utz Claassen y Miquel Àngel Nadal inaugurando la tienda del club en el balneario 8. | Pere Bota

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El Mallorca intensifica las gestiones para desprenderse de un enorme puñado de futbolistas cuyo rendimiento la pasada temporada estuvo muy por debajo de lo esperado y que como es lógico ahora no cuentan con vistas al proyecto de la próxima temporada. Salvo un número reducido de apenas ocho o nueve jugadores, el resto está en la línea de salida, pero solo es una posición, un tratado de intenciones porque hay contratos de por medio y mucho dinero comprometido en los mismos.

Futbolistas como Agus, Pau Cendrós, Gulan, Joao Victor, Bustos, Markovic, Asssulin y Albert Riera, todos tienen el cartel de transferibles, pero otra cosa es que realmente puedan salir. El rendimiento de Fofo, Truyos y Joselu ha dejado mucho que desear y también por ellos se escucharán propuestas, aunque no es fácil que estas lleguen a las oficinas de Son Moix.

El club es consciente de que un proyecto de ascenso no puede edificarse sobre un grupo de jugadores que no dio la talla y salvo excepciones como las de Pereira, Arana, Javi Ros y Company, unidas a las posibilidades de mantener a Xisco y Yuste, el resto está en posición de salida. Durante el acto de inauguración de la tienda del Mallorca en la Platja de Palma, Utz Claassen admitió que existen dificultades para poder llevar a cabo el plan ‘renove’ que exige este nuevo proyecto. «Tenemos una situación de más de 15 jugadores que tienen contrato, pero tenemos que recordar la situación que se creó, una situación en la cual el entrenador, el director deportivo, el consejo de administración, la afición, los medios de comunicación, no estuvieron al cien por cien contentos con el rendimiento, eso es un secreto a voces, todos pensamos que hay que aumentar el rendimiento, la entrega, la lucha y la actitud», explicó el presidente y máximo accionista del Real Mallorca.

Con este panorama se hace imprescindible una capacidad de negociación que sea ágil y a la vez dé resultados de inmediato porque antes de entrar se hace necesario dejar salir y ahí radica gran parte del problema.

Classen incidió en que debido al rendimiento de gran parte de los futbolistas del pasado curso, esto obliga «a que haya varios cambios en el equipo» y ahí es donde admitió que se trata de «una situación complicada y difícil». «Pero los problemas hay que solucionarlos y los problemas complicados también hay que solucionarlos», apuntó el máximo accionista del Real Mallorca. Miquel Àngel Nadal también apuntó la necesidad de cambiar caras en el vestuario y matizó que la dificultad no es solo económica a la hora de tratar de buscar salida a los descartes. «Cada caso tiene circunstancias diferentes, hemos hecho algunas valoraciones, pensamos que hay algunos jugadores que tienen que salir y es un tema de contratos y hay que intentar solucionarlo con ellos y sus agentes. No solo es un tema económico, algunos son económicos y deportivos y otros son deportivos, hay que intentar hacer el mejor equipo y que este sea lo más competitivo posible», apuntó Miquel Àngel Nadal.

El club tiene perfilados varios refuerzos que confía en presentar en los próximos días de esta semana o ya la próxima cuando haya empezado la pretemporada. En este sentido, Utz Claassen dijo no estar preocupado porque el hecho de que no esté la plantilla al completo el día 7 de julio no representa un problema.