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Gael Monfils apartó a Rafael Nadal de la primera final de la temporada en el torneo de Doha al imponerse por 6-3 y 6-4 y hoy protagonizará un duelo fratricida con Jo Wilfried Tsonga, que se vio beneficiado por la incomparecencia del suizo Roger Federer.

Nada fue como se esperaba para el torneo de Doha, uno de los primeros eventos oficiales del año, que contemplaba una lucha por el título entre el mallorquín y el suizo, que abandonó aquejado de una lesión en la espalda.

Después, Nadal tampoco cumplió las expectativas. El balear encajó su primer revés oficial del curso. El balear está en plena puesta a punto. Nadal perfila aún tanto su situación física como la aclimatación a ciertas variantes en su juego, que incluyen el cambio de raqueta.

El tenista balear, que no cede puntos al repetir el mismo resultado que la temporada pasada, no pudo frenar el buen tenis de su rival, especialmente en el primer set. Nadal no puso en cuestión el saque de Monfils, que ganó por 6-3.

Nadal dispuso de oportunidades en la segunda manga. Tras romper en el segundo juego el saque del galo por primera vez, llegó a tener una ventaja de 4-1, pero Monfils logró un parcial de 5-0 para dar la vuelta a la situación y cerrar el partido.

«No creo que hiciera un mal partido», apuntó Nadal. «En el segundo set comencé a hacer bien las cosas. Hice lo que tengo que hacer para ganar un partido contra Monfils», añadió.

Nadal destacó que en el tramo final no estuvo a un gran nivel. «No jugué muy bien al final del partido. Tuve también un poco de mala suerte en algunos puntos decisivos», indicó.

«No acerté en algunos movimientos del final. Él fue mejor que yo y le felicito. Está jugando muy bien», concluyó Nadal, que encajó ante Monfils su primera derrota oficial de la temporada.