El pívot del Mallorca José Amador lanza a canasta ante dos adversarios. | Jaume Morey

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La plantilla y el cuerpo técnico del Logitravel Mallorca Bàsquet alzará la voz. Tras meses sin cobrar, la situación límite que atraviesan los profesionales ha provocado que Xavi Sastre y los suyos opten por dar un paso al frente. El lunes explicarán el momento tan delicado que están viviendo tras el entrenamiento previsto en el Palau d'Esports d'Inca, donde se sentarán frente a los micrófonos para lanzar un nuevo SOS.

El vestuario del Mallorca Bàsquet ha mostrado un comportamiento modélico a pesar de los atrasos que acumulan en las nóminas. Los jugadores han cobrado 500 euros en cuatro meses y medio y los entrenadores 400 euros. Los problemas en las cuentas se contraponen con el nivel exhibido en la liga. El conjunto naranja se encuentra instalado en la zona cómoda de la tabla después de haber logrado ocho victorias en las 17 jornadas disputadas.

Con la permanencia apalabrada, la supervivencia no está tan clara. «Dudo que el año que viene haya baloncesto profesional en Mallorca a menos que salga un mirlo blanco», analizó Xavi Sastre tras ganar al León. «Las instituciones nos han quitado el 70% y las empresas, como no se les ayude con beneficios fiscales, no apostarán por el deporte», valoró el técnico, que también criticó el papel de la Federaeción. «La FEB debe pensar que si quiere mantener selecciones a nivel alto debe cuidar desde la EBA hasta la LEB Oro y tendrían que pensar en ayudarnos bajando canon o arbitraje. Todo el mundo baja sus salarios en educación, sanidad, etcétera, pero en la Federación todo sigue igual o más», manifestó.

Hasta el momento las reivindicaciones fuera de la pista se han limitado a lucir unas camisetas en los prolegómenos reclamando el cobro del dinero pactado. Los jugadores y técnicos no pueden más y han decidido convocar una rueda de prensa para explicar el momento que viven.

La salida de Levi Knutson supuso un punto de inflexión en la crisis del club. El jugador norteamericano, que estaba en la Isla cedido por el CAI Zaragoza, puso rumbo a Huesca tras sucederse los impagos y podrían seguir sus pasos otros jugadores, aunque hasta la fecha todos han constatado su compromiso con el grupo. La unión del vestuario y el trabajo de Xavi Sastre en la gestión del grupo ha propiciado que no se desatara la fuga de efectivos y que el rendimiento esté por encima de las expectativas de un equipo en crisis. No en vano la plantilla no ha fallado a un entrenamiento pese a la propuesta de plante que se realizó.