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El tenista español David Ferrer ha debutado con un trabajado triunfo ante el canadiense Milos Raonic en el Masters 1.000 de Shanghai, penúltimo del año, en un choque en el tuvo que esforzarse al máximo para sellar su pase a los octavos de final.

El de Jávea, semifinalista la pasada semana en Tokio, fue a remolque en los dos sets, pero terminó imponiéndose por 7-5 y 7-6(7) para citarse en la próxima ronda con su amigo Juan Carlos Ferrero, verdugo horas antes de Fernando Verdasco.

El número cinco del mundo tardó en entrar en el partido y Raonic lo aprovechó con un 'break' en el primer juego que le permitió ponerse con la primera renta (2-0). Sin embargo, el pupilo de Javier Piles igualó la contienda en el octavo juego y a partir de ahí dominó.

Poco a poco conseguía hacer daño a Raonic, que multiplicó sus errores no forzados --acabó con 36 por 16 de Ferrer--, y convirtió un 'break' definitivo en el duodécimo juego que significó el triunfo en el primer parcial.

El segundo set marchó por los mismos derroteros, Raonic, entrenado por Galo Blanco, olvidó sus defectos de la primera manga y salió al ataque con una nueva ventaja inicial (3-2). Pero su ofensiva volvió a ser inútil porque 'Ferru' puso las tablas en el octavo juego y el partido se resolvió en el 'tie-break'.

De nuevo en el desempate, Raonic gozó de la primera oportunidad, con un 'set point' que salvó Ferrer con 6-5 en contra. Finalmente, los fallos del canadiense dieron el pase al alicantino que en la próxima ronda se cruzará con Ferrero, ante el que presenta un favorable 6-2.