palma local llegada de la nadadora marga crespi foto miquel a. cañellas

TW
1

La colección de medallas de Marga Crespí no para de crecer. Y el Mundial de Shanghai no ha hecho más que aumentarla con dos nuevos bronces que consolidan a la nadadora mallorquina en el equipo español de sincronizada en plena cuenta atrás hacia los Juegos de Londres, que supondrían su estreno olímpico.

La deportista del Club Mediterránea regresó a casa tras muchos meses de entrenamiento y competición, luciendo el botín conseguido en China, donde las anfitrionas se convirtieron en un rival añadido a Rusia en la carrera por el oro. Pese al cuarto puesto en Combo, los bronces en rutina libre y técnica, las dos modalidades olímpicas, alimentan las esperanzas de Crespí, recibida por las principales autoridades deportivas de la isla y el presidente de la Federación Balear de Natación, Raúl García.

Crespí explicó que los dos bronces eran «un buen resultado» y que quedarse fuera del podio en Combo era una opción contemplada «pues no entrenamos esa rutina del todo». Eso sí, la nadadora de Ciutat -quien podría dar nombre a la futura piscina de Son Ferriol- tiene un objetivo claro: Londres 2012.

Y de cara al gran evento, tiene claro que «el oro olímpico es un sueño. Para luchar por él iremos a por la plata, que teniendo en cuenta cómo está Rusia sería un gran resultado. Vamos a superar a las chinas, que han jugado en casa y se han llevado una plata que era nuestra, pero el reto es coger a las rusas y estar otra vez en el podio».

El camino hacia Londres pasa por el Preolímpico y el Europeo, pero el Mundial de Shanghai ha servido para demostrar, a juicio de Marga Crespí, «que aquí no se regala nada».

Ahora, unas merecidas vacaciones permitirán poner el contador a cero rumbo al gran reto que aguarda a Crespí y sus compañeras, que siguen entre la aristocracia de la natación sincronizada a nivel internacional y han bañado el bronce a un deporte abonado de forma habitual al éxito.