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Fernando Fernández No es una misión imposible, pero no se aleja mucho. Bàsquet Mallorca y CAI Zaragoza, dos equipos diseñados con objetivos diametralmente opuestos, topan en el Palau d'Esports (18:15 horas, IB3 Televisió) con un mismo objetivo, pero con diferente armamento. Mientras los aragoneses pondrán sobre el parqué una de las mejores plantillas de la LEB Oro, Xavi Sastre tendrá que hacer malabarismos para suplir las notables ausencias de Joan Riera y Daniel Northern. El base mallorquín será reservado de cara a las vitales citas de la próxima semana tras sufrir una distensión en el músculo poplíteo de la parte posterior de su rodilla izquierda, mientras que el pívot estadounidense se recupera del esguince de grado 2-3 que sufrió en su tobillo, y espera el resultado de la resonancia magnética para saber si tiene o no que pasar por el quirófano.

Con este panorama, y con lo puesto, el Mallorca busca la campanada. Más que un partido, la cita frente al CAI -la primera que contará con las cámaras de IB3 Televisión como testigos tras firmarse días atrás el acuerdo entre el ente público y la entidad- se erige, con el paso de las horas, más en un trámite.

El potencial de los maños está fuera de toda duda. El retorno a la ACB tras su fugaz regreso vuelve a ser el reto, y un ex del Palau (José Luis Abós) es el elegido para reconducir la nave aragonesa. Inmersos en el colapso clasificatorio (4-3), los de Príncipe Felipe no acaban de hallar la regularidad que les catapulte hacia la cúspide. Derrotas como las sufridas ante La Laguna, Breogán o Axarquía -con un gran Miki Servera- no entraban en los planes de un CAI que cuenta con una sólida base -Quinteros, Phillip o Lescano-, y que ha sabido reforzarse para hacerse infranqueables. Chinemelu Elonu o Edu Sánchez, por ejemplo, abanderan el relevo en la pintura y la dirección del juego zaragozano.

Ilusión
El técnico del Bàsquet Mallorca, Xavi Sastre, sabe que hay mucho que ganar esta tarde, pero no esconde que «tenemos dos bajas muy importantes -Riera y Northern-, pero nuestra plantilla es corta y una mínima lesión nos hace temblar». Para derrotar al CAI, el preparador naranja sabe que «nos tiene que salir un partido redondo, perfecto. Si con la plantilla al 100% es complicado ganarles, ahora lo es mucho más, pero debemos multiplicarnos para afrontar con garantías el partido». Sastre no se cortó al hablar del CAI como «el mejor equipo de la categoría».

Pese a su buen balance en el Palau (2-1), la falta de regularidad lejos de su centro de operaciones es la cuenta pendiente de un Mallorca que para su entrenador derrocha «ilusión y capacidad de trabajo». Y al que sólo separa una victoria del CAI.