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Efe |CASTELLÓN
El Villarreal confía en tomarse esta noche ante el Arsenal la revancha de la eliminación ante el equipo inglés de hace tres años en esta misma competición, aunque el conjunto de Arsene Wenger se amparará en Cesc Fábregas para tratar del frenar al cuadro español.

Los villarrealenses afrontan el duelo, correspondiente a la ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones, con el recuerdo de aquella semifinal del torneo de 2006, que los ingleses superaron por la mínima, gracias a un 1-0 en Londres y un posterior empate sin goles en Villarreal.

Para encarar con garantías de éxito el choque, el Villarreal deberá olvidar el nefasto fin de semana que ha vivido el equipo tanto por la derrota por 3-0 en Almería como por la grave lesión de uno de sus mejores jugadores, Santi Cazorla.

La gran duda del técnico Manuel Pellegrini es precisamente quién sustituirá al lesionado Cazorla. El argentino Ariel Ibagaza y Rubén Gracia 'Cani' se disputan esta plaza de un equipo inicial en el que el resto parece claro que será el once de gala del entrenador chileno.

Para la trascendental cita ante el Arsenal, Pellegrini recuperará a la pareja titular de centrales formada por el argentino Gonzalo Rodríguez y el uruguayo Diego Godín, tras dos meses de lesión del primero de ellos. Además, destaca la vuelta al equipo en el centro del campo del hispano-brasileño Marcos Senna, una vez superado el esguince de tobillo que le impidió jugar el sábado en Liga, mientras que en el ataque estarán el turco Nihat Kahveci y el italiano Giuseppe Rossi.

En el equipo inglés, la reincorporación de Cesc, el capitán y pulmón del equipo, da a un Arsenal que atraviesa de nuevo un momento dulce, una inyección de moral. Los cañoneros vuelven a disfrutar de una etapa amable. Los pupilos del disciplinado míster francés, apodado el Profesor en el Reino Unido, firmaron una victoria por 2-0 en su anterior compromiso liguero con el Manchester City.

En el resultado, rubricado por el delantero Emmanuel Adebayor, el internacional español Cesc resultó también clave para asistir en los goles a su compañero togolés, quien también ha vuelto al once londinense tras una convalecencia.

Junto a la reincorporación del inglés Theo Walcott o el holandés Robin van Persie, Wenger vuelve a contar con una escuadra en la que ya no duelen las ausencias y en la que se nota sobremanera la presencia de su capitán, adorado en el equipo y pilar indiscutible de esta plantilla en el medio campo. En la «Premier», la situación ha vuelto a enderezarse. El equipo vuelve a estar dentro de los «cuatro grandes» del torneo y se encuentra invictos 17 partidos.

Sin embargo, la presencia del holandésVan Persie no está garantizada pese a que el jugador ha superado una lesión de abductores.