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Miquel Alzamora La Liga se aproxima a su fase decisiva y el Mallorca anda metido en plena lucha para salvar la categoría, tomar impulso en la clasificación y evitar jugárselo todo en las últimas cuatro jornadas de la temporada donde deberá enfrentarse a Sevilla, Barcelona, Real Madrid y Villarreal.

Por eso, para llegar más holgado al terrible final de campeonato hay que avanzar todo el trabajo posible y por esto hoy es fundamental conseguir la victoria ante el Atlético de Madrid, un equipo que llega a Palma superado ya el 'schock' de verse eliminado de la Champions y con la imperiosa necesidad de sumar puntos que le continúen teniendo enganchado al vagón de cabeza. Con Abel Resino el Atlético ha adelantado la defensa, lo que hace que todo el equipo se aproxime más a Agüero y Forlán, de ahí que se explote al máximo el 'arma letal' del conjunto madrileño. Entre los dos suman 32 goles en la Liga, de ahí que Manzano ande recomponiendo el equipo, trazando líneas y más líneas en la pizarra y buscando una fórmula que le permita tener opciones de romper la conexión entre las zonas del campo y si es posible tener opciones en ataque.

Abel sabe que arriesga, pero en el fútbol es imprescindible correr riesgos para lograr objetivos y en los últimos tres partidos de Liga anotó cuatro goles frente al Barcelona, empató ante el Real Madrid desperdiciando muchas oportunidades y marcó tres tantos contra el Villarreal, es decir, el Atlético llega, llega mucho y además marca. El Mallorca que plantaba cara a los grandes y a los que jugaba de tú a tú ha pasado desde hace mucho tiempo a la historia, la realidad ahora es diferente y el conjunto balear afronta los encuentros con máximas precauciones con el fin de mantener la portería a cero. Hoy no será una excepción y la primera condición es no perder, a partir de ahí el plan puede salir perfecto, o no. Si marca el Atlético todas las precauciones sirven de poco y hay que salir a arriesgar. Si el conjunto balear tiene el acierto de cara y se avanza en el marcador, entonces el trabajo semanal tendrá su recompensa. Pero el 'fútbol ficción' queda para eso, para el debate periodístico y el análisis, la realidad se trasladará al césped a partir de las nueve de la noche. Mallorca y Atlético cerrarán la jornada 28 y si bien ambos tienen margen de maniobra a la hora de conseguir sus respectivos objetivos, a nadie se le escapa que la de hoy se trata de una jornada con cierta pinta de trascendental.

Para añadir más emoción a la función, el equipo balear sabrá ya el resultado de sus principales rivales, pero lo más importante, más allá de verse o no beneficiados por lo que puedan hacer terceros implicados, es sumar los tres puntos y ganar. Los equipos de Manzano tienen eso, pasan del bostezo más soporífero encadenando una derrota tras otra, a transmitir cierta alegría y olvidarse de perder. En estas se encuentra ahora el cuadro balear que perseguirá su séptima jornada sin caer derrotado, una racha elogiable y que ha permitido a los baleares cambiar de mentalidad y afrontar esta fase de temporada con garantías de triunfo. No está Jurado por 'imperativo legal' en los locales y Perea por los atléticos se cayó ayer mismo de la lista. El club ha mentalizado al entorno de la importancia que tiene una victoria esta noche y es que la temporada va llegando a sus últimas curvas. Hoy llega una de cerrada. Habrá que saber tomarla.