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La operación retorno se implanta en el Real Mallorca. En la última década, el club balear ha buceado en su pasado para reflotar su futuro. Pepe Gálvez fue uno de los primeros en coger el puente aéreo de ida y vuelta; Pep Lluís Martí es, de momento, el último. Entre medias, un torrente de regresos. Algunos desembocaron en todo un acierto. Como el de Miquel Angel Nadal, Marcos Martín, Ibagaza o el más reciente de Güiza. Otros, en cambio, fueron un fiasco. Tristán, Finidi, Stankovic...

No fue el de Gálvez el regreso perfecto. Después de vivir una época de esplendor en aquel Valencia de Luis Aragonés, donde formó una pareja letal con Mijatovic, el mallorquín aceptó fichar por aquel Mallorca en Segunda División de la campaña 1996-97. No aportó demasiado, pero se quedó y participó en la primera temporada de Cúper. Marcó 5 goles en 25 partidos y al año siguiente firmó por el Betis.

El sevillano Carlos Domínguez también encontró acomodo en el Mallorca. Convertido en el héroe del ascenso, el pequeño delantero tuvo un paso fugaz por su Sevilla antes de volver al Mallorca. Permaneció cinco temporadas más.

Sin duda, uno de los regresos más sonados fue el de Miquel Angel Nadal. El central manacorí sorprendió a todos. Cuando muchos pensaban que viviría un retiro dorado, Nadal no sólo se ganó por derecho propio una plaza en el equipo titular, sino que incluso disputó el Mundial de Corea y Japón con la selección nacional con ¡36 años! Se retiró a comienzos de la campaña 2004-05 después de casi dos décadas en la élite. Dejó una marca de 255 partidos en Primera División con el Mallorca que se antoja difícil de superar.

Otro veterano que cumplió fue Marcos Martín. Tras casi una década entre el Sevilla y el Mérida, el centrocampista se hizo con un hueco en el equipo isleño durante cinco campañas.

Después regresaron a la Isla jugadores como Stankovic, Paunovic, Finidi o Tristán que no mejoraron, sino todo lo contrario, su primera etapa y que abandonaron el club por la puerta de servicio.

Los últimos que se embarcaron en esta operación retorno fueron Ariel Ibagaza y Dani Güiza. Ambos demostraron su clase, sobre todo el segundo, que la pasada temporada conquistó el Trofeo Pichichi al jugador más goleador de la Liga y fue Bota de Plata tras Cristiano Ronaldo. Obtuvo el premio de la Eurocopa y hace unos días fue traspasado al Fenerbahce. Ibagaza, el mejor pasado del último torneo, optó por irse al Villarreal. Martí es el último ejemplo de una fórmula que le suele funcionar al club balear.