El futbolista del Sevilla, en una imagen captada junto al presidente de la Real Sociedad, cuando fue presentado como jugador del equipo vasco el pasado enero.

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Miquel Alzamora Pep Lluís Martí es uno de los objetivos del Real Mallorca para la temporada 08/09 y el club balear ya sabe que las intenciones del centrocampista bermellón son las de regresar a la Isla y vestir otra vez la camiseta roja.

El jugador no se manifestará al respecto públicamente hasta que finalice la Liga ya que ahora es futbolista de la Real, aunque cedido por el Sevilla, y es preferible seguir pensando en el interés colectivo y de equipo que no en asuntos particulares. El equipo vasco, que ayer ganó en Tenerife por un gol a dos, con Martí otra vez en el once titular, tiene el ascenso en su mano, por lo que cualquier asunto extradeportivo queda totalmente aparcado hasta que no expire el campeonato nacional.

Sin embargo, el centrocampista no ha escondido a sus más íntimos que su deseo sería el de fichar por el Mallorca con vistas a la próxima campaña, toda vez que el equipo que entrena Gregorio Manzano tiene su nombre situado en lugar preferencial en la lista de contrataciones.

Martí cubriría la vacante de Basinas convirtiéndose en el perfecto acompañante de Ibagaza o Borja en la zona de creación. El director deportivo Nando Pons sabe de las intenciones del futbolista, pero ni él ni tampoco el centrocampista ventilarán excesivamente sus deseos ya que esto puede dificultar la operación en la que el Sevilla tiene también mucho que decir.

Dos años más
Martí tiene dos años más de contrato con el club hispalense, aunque es previsible que si el actual entrenador, Manolo Jiménez no cuenta con él, se le facilitará la salida toda vez que es un futbolista ejemplo en el club y que lo ha dado todo los años que ha permanecido bajo la disciplina del conjunto andaluz. En declaraciones efectuadas a Ultima Hora el pasado 15 de septiembre de 2007, Pep Lluís aseguraba que «nunca esconderé la ilusión que tengo por volver a la Isla», calificando de «sueño» el hecho de poder volver a vestir la camiseta roja. «Dios dirá si el sueño de volver al Mallorca se cumple, en estos quince meses he cumplido muchos, por qué no se puede cumplir éste de volver», se preguntaba el centrocampista mallorquín.

Por encima de otros nombres que también están sobre la mesa del director deportivo, se apurará la posibilidad de contratar a un jugador implicado con el club, que conoce bien la casa, que no necesitará periodo de adaptación y que ha demostrado sobradamente su calidad sobre el terreno de juego. De hecho, una de las injusticias que ha cometido el seleccionador español, Luis Aragonés, ha sido no dar oportunidad a Martí de vestir la camiseta de España cuando ha sido uno de los jugadores más determinantes en el mejor Sevilla de la historia. Ahora, con tres jornadas todavía por disputar en Segunda, el futbolista pretende aislarse de cualquier situación que tenga que ver con el futuro y centra toda su atención en lograr el objetivo del ascenso con la Real. Después deberá comprobar cuáles son los planes del Sevilla y si el equipo de Nervión está o no dispuesto a facilitarle la salida. El Mallorca cuenta también con la posibilidad de que aparezcan otras ofertas por Martí, pero confía en que pese más el deseo del jugador de regresar a su club de origen y a su casa antes que dar inicio a otra etapa profesional que, en este caso, sí le impediría ver cumplido su deseo de vestir de nuevo la camiseta mallorquinista. Es por lo tanto cuestión de esperar acontecimientos, aunque lo más importante es que tanto el club como el futbolista tiene el objetivo de volver a unir sus destinos.