TW
0

Javi Mata |CASTELLÓN
El centrocampista argentino Juan Román Riquelme se ha despedido con polémica de la liga española después de cinco temporadas, 136 partidos y 39 goles, varios meses de tira y afloja entre el futbolista, el Villarreal y el Boca Juniors.

Tras un paso gris por el Barcelona, Riquelme recaló en el Villarreal y su juego y los resultados del equipo castellonense devolvieron al futbolista internacional a lo más alto del panorama mundial, aunque últimamente había vuelto al ostracismo en el mismo club que lo recuperó. El punto de inflexión del jugador internacional argentino en el Villarreal y en la liga española coincide con el momento en que falló un penalti en el partido de vuelta de las semifinales de la Liga de Campeones contra el Arsenal londinense en El Madrigal, en la temporada 2005-2006.

Riquelme cargó por mucho tiempo con el fallo de esa pena máxima en el último minuto de partido, que impidió que el partido fuera a la prórroga. Desde que cometió ese error empezó a cambiar su suerte en el equipo castellonense. De hecho, siete meses más tarde, el cuerpo técnico del Villarreal, encabezado por Manuel Pellegrini, decidió apartar al jugador del grupo, tras un enfrentamiento con el técnico chileno y con el presidente, Fernando Roig, por las vacaciones de Navidad.

Esta situación favoreció la salida del jugador en forma de cesión al Boca Juniors a mitad de la pasada temporada, un préstamo que finalmente ha acabado en un traspaso definitivo. Ese fichaje no reportará a ninguno de los dos clubes españoles por la inversión realizada. El Barcelona no logró recuperar los casi veinticuatro millones de euros que le costó el jugador y tuvo que conformarse con siete millones, un poco más de la cuarta parte de este traspaso. Mientras, el Villarreal tan sólo recuperará algo menos de la mitad de esa inversión, unos tres millones de euros, realizada hace dos temporadas, ya que en sus dos primera temporadas en el Villarreal, Riquelme estaba cedido por el Barcelona. Si la apuesta económica ha sido negativa, la salida del jugador tampoco ha estado exenta de polémica, pues Riquelme ha finalizado su paso por ambos clubes, inmerso en una situación extraña y de mala relación con los dirigentes e incluso con la grada.

Riquelme llegó a España de la mano del ex presidente del Barcelona, Joan Gaspart, en la temporada 2002-03, y debutó el 1 de septiembre en un partido frente al Atlético de Madrid (2-2). Sin embargo, en el Villarreal, el centrocampista argentino, pasó de ser la referencia y crack del club tras los tres primeros años, a un futbolista apartado del equipo y sin opciones de jugar.

El futbolista debutó en El Madrigal frente al Madrid, en la campaña 2002-03, en el partido de la segunda jornada del campeonato, que finalizó con empate a un gol, y llegó a disputar con el Villarreal 116 partidos de Liga y marcar 36 goles. La aportación deportiva de Riquelme al Villarreal permitió al club lograr los mejores registros clasificatorios de su historia, ya que en su segundo año, el equipo acabó en tercera posición y disputó por primera vez en su historia la Liga de Campeones. Riquelme cerró su paso por el Villarreal el 17 de diciembre del pasado año, en un encuentro ante Osasuna en El Madrigal (1-4). Tras este encuentro, el futbolista ya no volvió a jugar más con la camiseta del conjunto villarrealense, aunque todavía le quedaba casi un año de vinculación al club.