El Drac se pone de «Gala»

«Microondas», «Metralleta»... Además de un ascenso a la ACB y una larga serie de méritos, Alberto Ruiz de Galarreta (Logroño, 1983) ha acumulado a lo largo de poco más de cinco campañas un conjunto de apodos que le delatan. Su muñeca resulta letal y ha servido para poner al Drac Inca de «Gala» en su regreso a la LEB. Ha llegado a la capital de es Raiguer con el cartel de cedido por el Menorca y el alero no está defraudando. Cuando el equipo más le necesitaba, Alberto ha aparecido para rescatar a sus compañeros a ritmo de triples.

No llevamos mucho de liga, pero su 80% de acierto desde 6,25 ha permitido enderezar el rumbo del Inca ante La Palma y Hospitalet cuando las cosas peor pintaban para los mallorquines. En el esteno oficial, resultó definitivo para tumbar a los de Rafa Sanz y a la pareja arbitral. Anotó cuando la pelota quemaba y estuvo valiente a la hora de penetrar, otro de sus puntos fuertes. Asumió su papel en todo momento, pese a tener por delante a un Stacey que deberá pelear por minutos con el riojano, un descubrimiento de Curro Segura, que le rescató de la EBA para darle una oportunidad en el verano de 2003, cuando empezaba a fraguarse el milagro mahonés.