Llorenç Serra Ferrer y Miquel Àngel Nadal posan con dos jóvenes futbolistas. Foto: JAUME MOREY

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La Federació de Futbol de les Illes Balears celebró ayer la gala de final de temporada del fútbol mallorquín en el Castell de Bellver con el entrenador del Real Betis, Llorenç Serra Ferrer, y el ex futbolista del Real Mallorca, Miquel Àngel Nadal, como grandes protagonistas de un evento que reconoció la labor de aquellas personas que llevan toda una vida vinculada al mundo del fútbol en la Isla. En uno de los marcos más atractivos de Palma y con la música tradicional como banda sonora, la velada reconoció la labor de instituciones, clubes, jóvenes y veteranos en favor del deporte rey y dejó para el final el plato fuerte con la entrega de les Botes d'Or al mejor futbolista mallorquín y al mejor entrenador mallorquín de la historia. Todos cuantos desfilaron por el escenario reflejaban la alegría de ver reconocido su trabajo por los suyos, es decir, por las propias personas del fútbol y en su tierra, sin duda, un premio del que no muchos pueden presumir y que incrementa el valor de los trofeos para añadirle la dosis de sentimentalismo.

El acto contó con la presencia de la alcaldesa de Palma, Catalina Cirer; el director de deportes s'Institut de Serveis Socials i Esportius de Mallorca, Toni Palerm; el concejal de deportes de Cort, Rafael Durán; Pep Barceló en representación del Govern y el presidente de la Federació de Futbol de les Illes Balears, Miquel Bestard, que fueron los responsables de hacer entrega de las respectivas distinciones que culminaron con la gran ovación para Nadal y Serra Ferrer. El técnico del Real Betis se mostró emocionado por haberse reencontrado con viejos amigos y por recibir un premio en su tierra, igual que Nadal, que llegó con el tiempo justo después de haber asistido al curso de entrenador de primer nivel que realiza actualmente en Madrid. El ex futbolista del Real Mallorca y del Fútbol Club Barcelona expresó su alegría y coincidió con Serra Ferrer al agradecer a todas aquellas personas que en su día contribuyeron a que alcanzasen la élite. Ambos también señalaron la importancia de que siga saliendo gente joven de las categorías inferiores y que se mantenga la ilusión por el fútbol.

El fútbol mallorquín, que finalmente ha cerrado con nota la temporada 2004-05, recordó a las dos figuras más grandes que ha dado la Isla en sus respectivas parcelas y vivió una velada impregnada de un ambiente festivo y, sobre todo, muy emotivo para las cerca de 200 personas que asistieron al evento y que después continuaron la fiesta con un aperitivo. A Serra Ferrer el reconocimiento le llega después de su temporada más brillante como técnico, mientras que a Nadal le ha tocado disfrutar del homenaje inmerso en su carrera por convertirse en entrenador y tras el curso en el que anunció su adiós. Jóvenes y mayores premiaron las trayectorias de ambos con una ovación y también aprovecharon para fotografiarse con ellos. La nota de color lo pusieron los acompañantes de ambos en el podio, ya que varios chicos posaron con ellos ataviados con la indumentaria de los equipos en los que han militado ambos.