Fernando Fernández13/04/05 0:00
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No sólo su aparatoso rescate y el hecho de dejar abandonado a los destinos del mar el Mini 6,5 que les permitía disputar la Regata Odyssée d'Ulysse en aguas de Cerdeña acabó con las energías de Hugo Ramón y Jimmy Tur. Con el «Emotionsailingteam.com» a la deriva y sin dar señales sobre su situación, bien porque la batería se haya agotado, haya volcado o porque se haya producido lo que nadie desea, es decir, que se haya hundido, los navegantes regresaron a primera hora de la noche de ayer a Mallorca concluyendo un viaje que se inició a primera hora de la mañana en Niza, pasó por Dusseldorf y tocó a su fin en Son Sant Joan. El sueño de Hugo de disputar la Mini Transat -regata en solitario que atraviesa el Atlántico- pasa por recuperar la embarcación que tuvieron que dejar ante las adversas condiciones climatológicas que padecieron -vientos de 50 nudos y olas de hasta 10 metros- y tras la insistencia de la marina francesa. «Nos resistíamos a abandonar, creíamos que saldríamos adelante, pero al final fue la decisión más acertada... Pero también la más dura, por lo mucho que hemos dejado allí. Cuando volaba en el helicóptero y veíamos el barco así, a la deriva, se me venía el mundo encima», relató un Hugo Ramón que con diecinueve años es una de las grandes promesas de la vela oceánica española.

Su experiencia hizo que en ningún momento sintieran miedo por su vida y la de Jimmy Tur, el armador del «Emotionsailingteam.com», cuya búsqueda es prioritaria. Hoy mismo, mantendrán un encuentro con el Real Club Náutico de Palma, que se ha movilizado, al igual que numerosos marinos y participantes en la regata a dos en la que tomaban parte hasta el pasado domingo, y que forma parte del circuito mediterráneo de la Mini Transat 2005, para la que Hugo se había clasificado y contaba con toda la infraestructura para afrontarla con plenas garantías.

«No pierdo la esperanza de poder encontrar la embarcación, pero sé que es díficil. Lo que más nos ha impactado es la solidaridad de la flota. Nos ha emocionado», dijo un Hugo Ramón que agradece todas las muestras de apoyo llegadas desde todo el mundo. Por su parte, Jimmy Tur consuela a su compañero de aventuras y sabe «que lo está pasando muy mal, la realidad es díficil de asumir, pero Hugo es valiente, un gran navegante y saldrá adelante, esperemos que con esta embarcación. No se rendirá fácilmente y tiene el apoyo de todos para logar su meta». En la zona del rescate, ayer se registraron olas de catorce metros, lo que ratifica que la decisión tomada por Hugo y Jimmy fue la mejor. Ahora arranca un desafío más apasionante: rescatar al «Emotionsailingteam.com».