Fede Pozuelo aguarda con atención el derbi del próximo sábado ante
el Drac Inca. El máximo responsable técnico del Alcúdia es
consciente de la trascendencia del choque y reconoce que «el que
pierda recibirá un golpe más duro de lo habitual». Tras caer en
Inca en la primera vuelta (83-77), Pozuelo quiere «vengar la
derrota» y afirma que «tenemos una motivación extra para encarar
este partido». Además, las necesidades de su equipo se ven
incrementadas tras caer el pasado fin de semana en la cancha del
Sabadell. El preparador insular asegura que «llegamos al derbi con
muchas necesidades, porque la derrota del domingo nos hizo
daño».
No obstante, Pozuelo piensa que en un choque como el que se
vivirá el sábado ante el eterno rival «todos los males desaparecen,
entran en juego muchos factores y cuenta más el cómo estás que el
cómo llegas». El sábado se darán cita el mejor equipo atacante de
la competición, el Inca, y el que mejor defiende, el Alcúdia. El
máximo responsable de los alcudiencs piensa que «la cosa está
bastante igualada, aunque creo que partimos como cierta ventaja por
el hecho de jugar en casa» y añade que «tengo la convicción
absoluta de que el derbi se va a quedar en Alcúdia».
Sobre las prestaciones de su rival, Pozuelo piensa que «el Inca
es un muy buen equipo, con un gran potencial físico» y asegura que
no comparte los pensamientos del técnico inquer Juan Díaz, quien
afirma que «fuera de casa somos blandos». Para Pozuelo «quizás diga
eso para motivar y sacar el máximo rendimiento a sus hombres». De
sus jugadores, el técnico del Alcúdia piensa que «tenemos un buen
grupo, pero hasta el momento no hemos podido rendir como se
esperaba; las bajas nos han privado de poder trabajar con la
estabilidad necesaria».
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