TW
0

La voz quebrada por los gritos. El rostro cansado. Pero satisfecho, muy satisfecho por el empate arrancado el pasado domingo del estadio Sánchez Pizjuán (1-1), el punto de partida de su nueva etapa en el banquillo del Real Mallorca. Héctor Raúl Cúper se asomó ayer a la sala de prensa de la Ciudad Deportiva con las cuerdas vocales castigadas, pero sin tiempo para el descanso. Apenas doce horas después de regresar de Sevilla, el técnico balear comenzó a diseñar el encuentro de mañana en Lanzarote, segundo asalto de la Copa del Rey. La igualada en Nervión dejó buenas sensaciones en la dirección técnica: «El equipo ha respondido bien a algunas cosas. Durante la semana trabajamos fundamentalmente los aspectos defensivos, sin descuidar lo otro, porque debemos ir paso a paso. Más allá del resultado, de que pudimos ganar o perder, quería ver la respuesta del equipo en algunos conceptos que habíamos intentado llevar a cabo. Si a ello le agregamos que enfrente tuvimos a un equipo muy fuerte, que no había perdido ningún punto como local, creo que el empate tiene mérito», señaló el técnico. Cúper ha aportado ciertos estímulos a la plantilla, aunque achaca el mérito «a los jugadores», y confía en remontar el vuelo «poco a poco». El valor anímico del botín no alcanzó para «nada desde el punto de vista clasificatorio», pero para ser el primer examen «está bien».

El de Chabas, que achacó su afonía a «la inactividad», señaló el golpe moral del resultado porque «el rival y la plaza eran importante» y los jugadores se han dado cuenta de que con dos o tres cosas «se puede mejorar». «He visto detalles interesantes y otros en los que habrá que tener paciencia. Todavía nos faltan mejorar algunos aspectos». Cúper agradeció el esfuerzo individual en beneficio del colectivo y tildó de normales «en este momento y por la situación en la clasificación» los errores cometidos, aunque lanzó un aviso: «Más adelante no deben ser normales porque con una cierta mecánica el futbolista puede hacer cosas sin estar condicionado a pensar lo que me ha dicho el entrenador. Hay cosas que se hacen solas y todavía nos falta un poco». El técnico argentino destacó el hecho de que apenas «nos pillaron a la contra», cerraron bien los espacios, aunque en el segundo tiempo «pagamos el ritmo físico».

El entrenador de Chabas le exigió a sus jugadores «el máximo esfuerzo posible porque no estamos para especular ni para manejar el partido en algunos aspectos». Cúper debutó en esta nueva etapa convirtiendo al Mallorca en el primer equipo que sale del Sánchez Pizjuán esta temporada con algún punto en su zurrón. Lamentablemente, ese empate apenas ha tenido reflejo en la tabla: «El resultado nos sirve para divisar la luz. Evidentemente el punto no nos dice nada en la clasificación, pero no se puede cambiar de golpe, de la noche a la mañana». Pero el futbolista se ha dado cuenta que «poco a poco podemos tener un orden de equipo», aunque incidió en «mejorar algunas cosas». En ese tránsito hacia la rehabilitación, resultados como el del pasado domingo tienen un gran valor anímico: «El orden no es garantía de ganar partidos, pero sí de que se saquen puntos y no se pierdan partidos, que a lo mejor ha sucedido por desconcentración o desatención durante esta temporada. El futbolista se rehabilita y empieza una etapa nueva. Mi campeonato empezó contra el Sevilla, aunque se hayan jugado unas cuantas fechas y la situación sea incómoda, pero creo que va a haber tiempo. Ahora se tienen que sumar puntos».