TW
0

0 REAL MALLORCA B: Cabrero (H), Campos (H), Dani (H), Jose (H), Rigo (H), Zazo (H), Souaidy (-), Rafita (H), Víctor (-), Sebas (HH) y Carmona (H)
Cambios: Javi (H) por Zazo y Enric Pi (H) por Rigo.
1 VECINDARIO: Santi Lampón (HHH), Carreño (H), Jero (HH), Dorta (-), Atxabal (H), Pepelu (HH), Viyuela (H), Pollo (H), Pepollo (H), Trigo (H) y Héctor Peláez (H)
Cambios: Víctor (H) por Pepollo; Dani (H) por Trigo y Roberto Yañez (H) por Viyuela.
Àrbitro: Gallardo Martínez (HH). Amonestó a los locales Cabrero y Dani y a los visitantes Santi Lampón, Pollo y Pepollo. Expulsó por doble amonestación al jugador del Vecindario Dorta (minuto 31).
Gol: 0-1, minuto 45, Trigo remata a puerta y Zazo desvía el balón hacia su porteria.

Carlos Román
El filial tiene un grave problema. El segundo mallorquinista sigue sin encontrarse y eso está provocando daños serios en su autoestima. Le resulta imposible superar la puerta contraria pese a las ocasiones que genera y se derrumba con demasiada facilidad ante las adversidades. Ayer y ante un Vecindario muy inferior que jugó durante 60 minutos con un hombre menos, los hombres de Cazorla dieron forma a un nuevo fracaso y deberán rehacerse a domicilio si no quieren verse inmersos en el fango a las primeras de cambio (0-1).
Salvo en la definición, no fue un mal partido del filial, que cercó al conjunto canario desde los primeros minutos. Rafita, Víctor y Carmona llevaban el peso ofensivo en el arranque y ponían a prueba la cualidades de Santi Lampón, que tardó poco en erigirse como el mejor futbolista sobre el terreno de juego. Los baleares llegaban de forma clara al área contraria y el Vecindario se limitaba a cumplir con el estereotipo de la categoría. Se defendía a trompicones, se proyectaba en ataque mediante balones largos y se empleaba con más dureza de la necesaria para frenar los avances de calidad de los insulares. Eso desembocó en una acción clave sobre la media hora de juego. Dorta recibía su segunda amonestación, dejaba a su equipo con diez y ponía el partido cuesta abajo al filial.

Los de Cazorla quisieron aprovecharlo y dieron una vuelta de tuerca mientras su rival adoptaba un aspecto todavía más áspero, más rácano. Aún así, supo dibujar su primera llegada a los dominios de Cabrero y obtuvo un rendimiento brutal. Trigo sacó un disparo extraño y Zazo en su intento por desviarlo lo envió a las mallas. Era el primer minuto de descuento del primer tiempo y el encuentro emitía unas sensaciones terribles.

Tras el descanso, el técnico del Vecindario cerró todas las puertas en defensa a costa de reducir efectivos en ataque y eso le dio resultados a medias, porque el Mallorca siguió llegando aunque lo hiciera sin pólvora. Víctor y Javi tuvieron las ocasiones más claras, pero Lampón siempre fue más efectivo que ellos.