Johnson reanima al Drac Inca

DRAC INCA (17+20+22+24): Sergio Rodríguez (13), Moraga (0), Joan Riera (9), Sneed (10), Steven Johnson (29) -cinco inicial-, Alberto Alzamora (5), San Emeterio (0), Boccia (5), Pedrera (3) y Lolo Castro (9).

18 de 45 en tiros de 2 puntos. 8 de 20 en tiros de 3 puntos. 23 de 29 en tiros libres. 46 rebotes (30 en defensa y 16 en ataque). 25 faltas personales.

ALCUDIA (17+20+13+27): Mena (0), Riveiro (0), Israel Pampín (8), Robert Joseph (13), Jason Blair (22) -cinco inicial-, Llorente (10), Xavi Ventura (2), López (0), Vaquero (12) e Iversen (10).

18 de 36 en tiros de 2 puntos. 9 de 26 en tiros de 3 puntos. 14 de 24 en tiros libres. 33 rebotes (24 en defensa y 9 en ataque). 26 faltas personales.

Arbitros: Avilés y López. Sin eliminados.

Fernando Fernández

El Drac Inca se reivindicó en un derbi que inclinó a su favor echando mano de Stevie Johnson -29 puntos, 14 rebotes y 4 asistencias- y puso fin a un inicio de competicíón en el que la fortuna le fue esquiva al grupo de Juan Díaz. La emoción fue la nota predominante en un choque que respondió a las expectativas sobre la pista, aunque en la grada faltó calor para una cita de alto vuelos.

Sneed fue la referencia en ataque del Drac Inca en los primeros diez minutos. La defensa de los inquenses dejaba opciones claras al Alcúdia, y Blair no dudó en aprovecharlas al máximo. Tuvo problmas el cinco de Juan Díaz en las ayudas defensivas, pero mantenía las distancias y, aunque el conjunto de Pozuelo pisaba los talones, no encontraban la forma de despegarse de un oponente incómodo, dispuesto a todo para mantenerse una semana más al frente de la clasificación. Jason Blair le dio un nueo color a la contienda en los primeros compases del segundo cuarto. Dos triples suyos ponían por delante al Alcúdia y Díaz buscaba soluciones de urgencia.

El Drac inca parecía fuera de combate, lejos del bloque que había frenado las ofensivas de los alcudiencs. Le costó a los gualdinegros anotar, y tardaron casi cuatro minutos en hacerlo. Como no, Johnson, apagaba las alarmas, pero un nuevo acierto desde 6,25 de Martín Vaquero establecía una preocupante máxima para el Alcúdia (19-27). Se consumaba un parcial de 2-10 que preocupaba, pero Boccia se encargó de dar más velocidad al juego del Drac. Fue el líder de un conato de remontada que alcanzaba su cénit gracias a la irrupción en el partido de José María Pedrera. su triple despertó a un Palau que languidecía (31-29), pero un 0-6 devolvió a la tierra a Díaz y los suyos (34-37).