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Miguel Luengo|LONDRES
Carlos Moyà volvió a demostrar su gran estado de forma al colocarse por primera vez en su carrera en los octavos de final de este Grand Slam y asegurar su presencia en la segunda semana de Wimbledon. El tenista mallorquín doblegó a Dmitry Tursunov, por 6-1, 6-4 y 7-5, aunque el tenis mallorquín se quedó sin su representante femenina al caer Nuri Llagostera ante Meghann Shaughnessy por 6-4, 4-6 y 10-8. Carlos Moyà salvó la papeleta española al derrotar con contundencia al ruso Dmitry Tursunov, por 6-1, 6-4 y 7-5. Lo mejor es que el español se gusta en su juego. Poco a poco ha aprendido a dominar los truquillos en hierba, y a buscar los puntos flacos de cada rival que le sale al paso.

Además en esta edición no ha tenido todavía oponentes de cuidado y los partidos le han servido para adquirir moral al solventarlos cada vez mejor: Cinco sets primero contra el francés Olivier Patience, cuatro después contra el checo Radek Stepanek y tres ayer contra Tursunov, contra el que exhibió de nuevo la calidad de su servicio, con 16 aces (lleva un total de 69 en tres encuentros) y un saque a 215 kilómetros por hora. Lo bueno es que se encuentra con ganas e ilusión para afrontar ahora un partido que había soñado en su momento, contra el australiano Lleyton Hewitt, campeón del 2002, un hombre que se le da especialmente bien, y contra el que no pudo medirse en el quinto punto de la final de Copa Davis contra Australia en Melburne el año pasado, ni en la final de Sydney a principios de esta temporada, cuando el juego del mallorquín brillaba en todo su esplendor.

Ferrero claudicó ante el tenis rocoso pero contundente de Robby Ginepri en una hora y 20 minutos, por 6-3, 6-4 y 6-1. El valenciano había tenido mucha suerte en la ronda anterior contra el austríaco Stefan Koubek, ante quien salvó dos bolas de partido, pero la experiencia de Ginepri en hierba, donde ha ganado el único título que posee (Newport en el 2003) fueron un factor insalvable para el de Onteniente. Eliminado Ferrero, Moyá será a partir del lunes 5 de julio en el número uno español. Hewitt fue el encargado de despedir, en un partido emotivo, al croata Goran Ivanisevic, campeón en el 2001 y ausente en las dos ediciones siguientes. El de Split decía así adiós a un torneo que ha llevado en su corazón siempre. La jornada fue un tanto aciaga para los españoles y el recorte se hizo notar de forma drástica. A la victoria de Moyà, única entre los hombres, solo pudieron unirse la de Virginia Ruano contra la eslovaca Henrieta Nagyova (6-4 y 6-4) y la de Magüi Serna contra la británica Jane O'Donoghue (6-3 y 6-3).

Estas dos victorias fueron las únicas de una jornada que se llevó a nueve españoles: Félix Mantilla ante Vincent Spadea, David Ferrer contra Hicham Arazi, y Tommy Robredo frente a Karol Beck. En chicas perdieron María Antonia Sánchez Lorenzo, contra Nathalie Dechy, Nuri Llagostera contra Meghann Shaughnessy y Arantxa Parra ante Rita Grande.