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El Campeonato del Mundo de pista del año 2004 puede marcar un punto de inflexión en la historia del ciclismo español. Joan Llaneras aspira al oro en Puntuación y Americana y, en caso de lograr uno de los dos títulos, igualaría el registro de Guillem Timoner. Los seis mundiales defelanitxer podrían pasar a los anales y Llaneras y Miquel Alzamora reeditan el éxito de Perth'97 y se enfundan además el maillot arco iris en la Americana. El pentacampeón mundial y oro olímpico de Porreres se encuentra ya en Melbourne, donde dará inicio la competición en la madrugada del miércoles, y ya ha tomado contacto con el Vodafone Arena, escenario de un evento en el que hay mucho en juego.

Miquel Alzamora será el siguiente en salir a la pista. Será en la prueba de scratch y en la mañana del viernes de España. Pese a no haberse clasificado, el de Artà se ha beneficiado de la invitación formulada por la UCI, y buscará un buen resultado, pese a que buena parte de las esperanzas de Alzamora están depositadas en la jornada del domingo. En la penúltima prueba del programa, la pareja española formada por Joan Llaneas y Miquel Alzamora perseguirá un doble objetivo. En primer lugar, un metal, pero quedar entre los diez primeros es otra obligación, pues otorga el pasaporte para los Juegos de Atenas, un objetivo que sigue presente después de la plata lograda en la manga de la Copa del Mundo celebrada semanas atrás en Sydney. Entre los días 26 y 30, el ciclismo balear tiene una cita con la historia en Melbourne y Llaneras puede firmar un registro para la posteridad.

Llaneras será el primero en asaltar un título, y lo hará mañana mismo. La prueba de Puntuación es el plato fuerte de la jornada inaugural, y el vigente ganador de la Copa del Mundo y subcampeón del mundo quiere resarcirse de la plata lograda el pasado septiembre en Stuttgart. Con su plaza para Atenas en el bolsillo, Llaneras tendrá menos presión que algunos de sus rivales que, además del podio, buscarán un lugar en la prueba olímpica. El británico Chris Newton, el argentino Juan Esteban Curuchet o el vigente campeón, el austríaco Franz Stocher, serán algunos de los enemigos más a vigilar, aunque la regularidad exhibida por Joan Llaneras a lo largo de la temporada invita al optimismo. Los marcajes a los que será sometido el balear serán su gran preocupación, pero salvo percance, la medalla parece asegurada.