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Atlético de Madrid 0
Recreativo de Huelva 0

ATLÉTICO: Burgos; Contra, Hibic, García Calvo, Sergi; Jose Mari, Albertini, Emerson, Luis García; Correa y Torres.
Cambios: Javi Moreno por Correa y Aguilera por Torres.
RECREATIVO: Luque; Merino, Begoña, Loren, Pernía; Javi García, Bermejo, Camacho, Viqueira, Benítez, y Xisco.
Cambios: Raúl Molina por Xisco; Galán por Benítez y Cubillo por Viqueira.
Àrbitro: Bernardino González Vázquez, del Comité Gallego. Mostró tarjeta amarilla a Pernía, Camacho y García del Recreativo y a Moreno, Contradel Atlético.

Fernando Castán|MADRID
El Recreativo de Huelva entró en la historia al clasificarse por primera vez para las semifinales de la Copa del Rey ante un gris e incapaz Atlético de Madrid, que no ha marcado un sólo gol al colista de la Liga en 180 minutos de juego. Impotente ante la portería del Recreativo, el equipo de Luis Aragonés sumó esta noche su primera gran decepción de la temporada en la que celebra su centenario. El Recreativo se presentó en el Calderón dispuesto a defender el resultado de la ida (1-0) ante la posibilidad de entrar por primera vez en su historia en unas semifinales de Copa del Rey.

Los onubenses lo fiaron todo al contraataque y a perder tiempo desde el primer minuto, y el Atlético repitió, prácticamente, el conjunto titular que perdió ante la Real Sociedad el pasado sábado, aunque con una buena primera parte en su haber. Pero en los primeros 45 minutos los locales se mostraron muy romos en ataque, si bien dominaron territorialmente al Recreativo. Sólo en el minuto 15, por medio de Luis García, tras jugada de Albertini y en el 27, también de cabeza, por medio de Jose Mari a la salida de un saque de esquina llegaron a la meta defendida por Luque.

Afortunadamente para los andaluces los delanteros atléticos pusieron de manifiesto similar torpeza y se llegó al descanso sin goles y con la sensación en la grada de que la eliminatoria se escapaba. En el segundo tiempo el Atlético puso cerco al área del Recreativo. La entrada de Javi Moreno, por un desafortunado Correa, dio más bríos a los rojiblancos que comenzaron a llegar una y otra vez. Aragonés acertó en el cambió. Sólo Viqueira en una falta parada por Burgos espectacularmente puso en aprietos a los locales.

La presión del Atlético de Madrid remitió cuando el técnico rojiblanco sustituyó a Fernando Torres, que si bien no había destacado en el partido, es un jugador que al igual que hizo hace diez días ante el Deportivo puede solucionar un encuentro a favor del Atlético. Aragonés, esta vez, se equivocó. El partido se convirtió en «un quiero y no puedo», pero el Mono Burgos todavía subió a rematar una falta a la desesperada que Contra envió a puerta y Luque atajó sobre la línea. La sorpresa estaba consumada.