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El violento paso del Sevilla por el Santiago Bernabéu ha reabierto un viejo debate. Futbolistas como Pablo Alfaro y Javi Navarro, que capitalizaron la desagradable demostación de malas artes de su equipo ante el Real Madrid, vuelven a estar bajo sospecha porque las tibias de muchos jugadores se exponen a un peligro difícilmente calculable. Navarro pisó a Ronaldo y tuvo que marcharse antes de tiempo -expulsado en el minuto 50 de partido-, aunque volvió a ser Alfaro quien se mostró más implacable.

En el vestuario del Mallorca, el repertorio de pisotones y patadas del Sevilla no han pasado inadvertidos. «Estoy convencido de que Competición actuará de oficio con Pablo Alfaro; es un jugador que en ocasiones se sobrepasa y lo que hizo con Michel Salgado no es correcto», admitió sin reparos Albert Riera a esta redacción. El centrocampista balear tiene claro que «cuando vas perdiendo por 3-0 y el contrario te está arrollando a veces se producen este tipo de acciones. No estoy buscando justificaciones, pero es importante tener en cuenta el contexto en el que se producen este tipo de jugadas».

Riera abundó en su opinión sobre la dureza con la que suele aplicarse Alfaro, uno de los futbolistas de Primera que más veces han sido expulsados. «Yo no soy nada para valorar la intencionalidad, un concepto que es clave, y estoy convencido de que ningún futbolista quiere lesionar a un compañero de forma premeditada, pero también creo que Alfaro a veces se muestra demasiado expeditivo y contundente. Personalmente no creo que jugadores como él deban ser sometidos a una vigilancia especial por parte de los árbitros, me parecería injusto, aunque si hay que castigar las acciones violentas», concluyó el internacional del Mallorca.

Frank de Boer, defensa del FC Barcelona, se mostró más categórico que Albert Riera. En declaraciones recogidas por Europa Press, el holandés dejó claro que «la Federacióntiene que hacer algo» contra las acciones violentas que protagonizaron algunos jugadores del Sevilla en el Santiago Bernabéu». Cuestionado por los pisotones de Alfaro y de Navarro, De Boer dejó claro que «eso no es fútbol. La RFEF tiene que hacer algo contra esas acciones, no se puede permitir».