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Miquel Alzamor La «Gacela» vuelve a correr directo a la línea de gol. Samuel Etoo volverá en Anoeta a su hábitat natural y eso siempre suele ser un problema para el equipo rival. La ausencia de Pandiani invita a Manzano a empujar al delantero camerunés hacia las inmediaciones del área donostiarra, lugar natural de un futbolista letal si el defensa de turno le da un palmo de terreno. Hasta la fecha, Etoo ha realizado un trabajo oscuro en la línea de tres cuartos, una labor que le ha impedido brillar como lo ha hecho Pandiani, pero de la cual el equipo ha sacado un positivo provecho.

Delante en plan matador o un poco atrás para recoger el esférico y cederlo a un compañero, a Etoo parece importante poco por dónde le sitúe el técnico. «Me encuentro cómodo en un campo de fútbol», dijo ayer ante la prensa. El futbolista del Mallorca, que un año más es candidato a coronarse como mejor jugador de Àfrica, es el socio natural de Pandiani pero en Anoeta se rompe y el camerunés vuelve a recobrar un protagonismo especial.

Con Ibagaza por detrás y flanqueado por Àlvaro Novo y Albert Riera, cuya misión es abastecerle de balones, Manzano confía en Samuel para batir la línea defensiva de la Real. «Ellos nos pondrán difíciles las cosas y hay que afrontar este próximo partido como si fuese el último, como si nos faltasen esos tres puntos para asegurar la permanencia. Con esta actitud y bien concentrados, tenemos opciones», aseguró Etoo.

La racha de la Real no es ni casual ni fruto de la suerte y el delantero no le resta mérito a lo que está consiguiendo el próximo rival en la Liga. «La Real está haciendo cosas muy grandes en favor de los equipos pequeños. Si siguen así, ganarán la Liga pero el domingo espero que podamos frenarles», apuntó la «Gacela» del Mallorca. Ni Carlos, ni «Turu» Flores, ni tampoco Tuni. Manzano prefiere seguir con los mismos ahí delante y confiará en idénticos jugadores cuando Pandiani vuelva al equipo en el último partido de año.