Samuel Etoo nunca pasa inadvertido. Alejado de los micrófonos
durante los últimos días, el futbolista no ha necesitado demasiado
tiempo para provocar una gran estampida de efecto imprevisible. Sus
críticas a los comités de la Federación (FEF) "a los que tildó de
«sinvergüenzas» en declaraciones recogidas por el diario Marca" han
provocado un profundo malestar en el seno de la entidad balear, que
considera contraproducente la actitud de Etoo. La dureza de sus
descalificaciones podría provocar una intervención de oficio de
Competición y prolongar la inactividad del jugador, que parece
haberse metido en un buen lío.
Samuel Etoo se siente agraviado. Las violentas acciones que
protagonizaron Sergio Ballesteros (Villarreal) y Pablo Alfaro
(Sevilla) han pasado inadvertidas para los integrantes del órgano
disciplinario de la FEF, que si actuó con rapidez en el incidente
que protagonizaron la pasada temporada el futbolista del Mallorca y
Miguel Àngel Angulo. «Cuando uno comete un error tiene que
asimilarlo, como yo estoy haciendo, pero lo que más me duele es que
los de Competición sean unos sinvergüenzas. A mí me meten cuatro o
cinco partidos, mientras que hay jugadores que pegan codazos en los
partidos y no les cae sanción».
Samuel Etoo, abundó en sus críticas a los comités subrayando que
«todos ellos matan a este deporte, estando sentados en sus
despachos, creyendo que están en su casa. Es una vergüenza. Cada
día nos enseñan que el mundo está dividido, igual que el fútbol».
Advertido por el club de que estas declaraciones sólo pueden
granjearle problemas, el jugador compareció ayer ante los medios de
comunicación en la Ciudad Deportiva de Son Bibiloni y evitó
polemizar aún más. De hecho, su llegada a la sala de prensa
coincidió con la salida del técnico Gregorio Manzano, quien en tono
distendido reprobó al futbolista en público "«te voy a tirar de la
oreja»" y solicitó a los periodistas que «no tiréis de la lengua al
muchacho».
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