Los europeos pudieron haber liquidado el pleito mucho antes si
no fuera por la pólvora mojada que se trajo hoy su goleador
Christian Vieri quien marró oportunidades muy claras de conquista.
Empujados por 41.000 espectadores que no cesaron de alentar aún en
la adversidad, Corea del Sur cambió el curso de los acontecimientos
mediante un tanto anotado por Seol Ki-Hyeon de cabeza a los 88
minutos, tras un centro corto preciso de Cha Doo-Ri, quien había
ingresado cinco minutos antes por Hong Myung-Bo.
Ese fue el comienzo del festejo que duró por lo menos media hora
después de acabado el match con un público pletórico y radiante que
no quiso abandonar el estadio World Cup y que continuó el festejo
afuera del moderno coliseo de Daejeon.
El gol de Seol fue el del empate, el que le dio derecho a
disputar el tiempo adicional de 30 minutos, en el que entró con
determinación para llevarse la victoria.
Italia se había adelantado en el marcador a los 18 minutos por
intermedio de Vieri tras un centro córner desde la izquierda de
Totti. Corea había desaprovechado un penal ejecutado por su
estrella Ahn. Su disparo fue desviado afuera por el arquero
Gianluigi Buffon.
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