Un Valencia en inferioridad borra ante el Inter el mal recuerdo de San Siro

Lorenzo Martínez - MILÀN
El Valencia, que curiosamente jugó mejor en el segundo periodo, con diez jugadores, tras la expulsión de Kily logró un meritorio empate en terreno del Inter de Milán (1-1), lo que le deja las cosas en su favor, en un partido sin gran calidad, pero que, en la segunda mitad, creció por la emoción y la incertidumbre. Un partido que resultó muy cómodo, tal vez demasiado, para el Valencia en su primera mitad, en la que controló, pero le faltaron «ganas de gol»; pero que en la segunda mitad, sobre todo en el primer cuarto de hora, se le complicó, y mucho.

El partido del «morbo» como fue definido hace tiempo por ser la esperada vuelta del Valencia al escenario donde perdió la última final de la Liga de Campeones y, además, con el reencuentro, pero en las filas rivales, del técnico argentino Héctor Cúper, resultó anómalo de inicio en cuanto a la alineación del Inter de Milán. La primera parte fue opaca, pero en la reanudación el Inter salió con mayores ganas, apretó algo más en centro del campo y llegó el 1-0, obra de Ventola, que tocó con la puntera sobre la línea un remate de cabeza del colombiano Córdoba y que después había rozado Materazzi. El tanto animó al Inter.

Además, cuatro minutos después, Kily González perdió la cabeza y se auto-expulsó al pisar a Kallon. Benítez reaccionó, metió a Angulo y le salió bien; el centrocampista robó un balón y lo cruzó sobre un solitario Rufete que no perdonó (m.64).