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Nuestro campeón más laureado tiene a partir de esta noche una cita con la historia. Xavi Torres se ha marcado un reto tan complicado como apasionante e intentará el asalto a una gesta sin precedentes, con la que pretende cubrir un nuevo capítulo de autosuperación (Son Hugo, a partir de las 20 horas). Para uno de los desafíos más grandes de su carrera, nadar 24 horas para batir un récord mundial, Xavi ha optado por su ciudad natal y por unas instalaciones modélicas. El complejo palmesano, en el que todo está listo para el día más largo, vestirá sus mejores galas y espera reunir a numerosos aficionados con el objetivo de apoyar al nadador en las horas más complicadas.

Además, aquéllos que lo deseen podrán participar junto a él en un relevo que se llevará a cabo en una calle de la misma piscina. Para que el público que quiera asistir a Son Hugo disponga de todas las comodidades a la hora de seguir el reto, se ha colocado un pantalla gigante en el mismo complejo y varias cámaras submarinas permitirán a los espectadores vivir más intensamente todo el desarrollo. Xavi lleva seis meses preparando esta prueba a base de entrenamientos aeróbicos a un ritmo máximo de 20 kilómetros al día y un máximo de siete horas en la piscina. Pero además del plano físico, el desafío implica una parte muy importante de preparación mental y psicológica.

Durante el desarrollo de la operación «Límite 24 horas», el mallorquín se avituallará por medio de un sistema ideado por los propios médicos, a través del que podrá ingerir líquidos mientras nada. Después de cada hora de nado, el deportista tendrá unos minutos para comer algo sólido y recuperar una pequeña dosis de energía.

El acontecimiento fue presentado ayer por su protagonista en un acto en el que estuvo acompañado por la directora general d'Esports, Joana Maria Petrus, la consellera de Presidència, Dolça Mulet y Santiago Coll como representante del IME. Junto a él estuvieron también David Meca y representantes del equipo médico que supervisará cada hora al campeón. Para Torres, la prueba tiene todos los ingredientes necesarios y de completarse de manera satisfactoria supondría colmar unas aspiraciones con un carácter muy especial. «Llevaba diez años sin competir en Mallorca y no podía haber elegido otro día mejor, estoy seguro de que la gente me apoyará en todo momento», apuntó.