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Un inoportuno incidente con la cadena no sólo costó cuatro segundos. En la meta del Port d'Alcúdia, Toni Colom se dejó la general, pero lejos de rendirse, el de Bunyola insistió hasta la extenuación a la caza de la gloria, buscando ser profeta en su tierra. Maximino Pérez no puede llevarse mejor imagen de su nuevo pupilo, cuya combatividad ha quedado fuera de duda. Relax Fuenlabrada acumula elogios en la Challenge, y no sólo de la mano de Toni Colom. El mallorquín renovó su reinado de la montaña, subió al podio junto a sus compañeros para recibir el premio al mejor equipo, y destacó como el mejor de los ciclistas baleares que tomaron parte en la prueba, dejándose ver durante las cinco etapas.

No hay motivo para pasar página de forma radical. Colom valora positivamente su paso por la Challenge, ya que «no se puede pedir nada más. Lástima del día del Port d'Alcúdia, en el que si no se me hubiera roto la cadena, estaríamos halando de que estaría en uno de los tres primeros lugares de la general». El hombre de Relax-Fuenlabrada tenía clara la estrategia a seguir, y no dudó en ponerla en práctica. «Sabía que el último puerto "Sa Gramola" haría mucho daño. Esperaba llegar allí con la gente más tocada, pero el Kelme ha dado la cara. He dado todo lo que tenía dentro y más. Además, a tres kilómetros de meta se ha caído un compañero mío y otro se ha entregado para que esté arriba. Por ello, debo dar las gracias a mis compañeros y mi equipo», destacó el profesional bunyolí.

Su presencia en la próxima entrega de la Challenge hace pensar en unas marcas más ambiciosas aún si cabe. «No sé cuál será el planteamiento por entonces, mis miras pueden ser diferentes, pero lo que debo hacer en este momento es seguir progresando en la temporada 2002, ayudar en lo máximo a Relax-Fuenlabrada, y demostrarles que la confianza que han depositado en mí está justificada», finalizó el joven ciclista al que un golpe de mala fortuna privó de estar hasta el último suspiro luchando por convertirse en el primer ciclista mallorquín que logra ingresar en el ilustre palmarés de la Challenge como vencedor absoluto de la primera prueba del calendario europeo.