El pelotón, rodando compacto durante la primera etapa de la Challenge Internacional Vuelta a Mallorca.

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Juan M. Giménez La primera etapa de la Challenge a Mallorca tuvo color español, ya que el corredor del Kelme Costablanca, Isaac Gálvez fue el vencedor al esprint. Gálvez, compañero de equipo en las competiciones de pista del mallorquín Joan Llaneras, marcó un crono oficioso de 1:38.12 horas, con el que dio tiempo al resto del pelotón. Segundo fue el ciclista alemán del equipo Telecom Erik Zabel, primero en la lista de la UCI la temporada pasada, mientras que el tercer puesto correspondió al alemán T. Wilhems (Team Coast).

El Passeig Marítim acogía una vez más el inicio de la Challenge y tal y como era de esperar, la etapa fue un calco de las de anteriores ediciones, diez vueltas al circuito del Passeig Marítim, aproximadamente 82 kilómetros, y poca actividad en el pelotón hasta las vueltas finales.

Es cierto que se pudo ver en cabeza a Tauler, que buscó sumar puntos para la general de las metas volantes, a Colom, que se dejó ver a rueda del último ganador de la Vuelta a España, Àngel Casero, pero al final todo se decidió en la última vuelta, aunque ya antes con las cámaras de televisión en directo, hubo movimientos por parte de algunos equipos con el fin de intentar controlar y estirar el grupo, pero no paso nada y así llegamos a la última vuelta al circuito donde Telecom y Mapei intentaron controlar la carrera para lanzar a sus hombres rápidos, pero el giro y sobre todo una caída de varios hombres cuando apenas faltaba menos de un kilómetro para la llegada hizo que el trabajo de los equipos con hombres rápidos no diera su fruto, lo que aprovechó Gálvez, muy bien colocado, para adjudicarse un triunfo poco esperado.