Armando despeja el balón en posición acrobática ante un jugador rival. Foto: TOMÁS MONSERRAT

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T.TERRASA-M.ALZAMORA El grupo de Aragonés retoma esta noche el pulso a la Copa del Rey, una competición en la que ha despositado muchas esperanzas. El cuadro balear se instalará en Balaidos con el claro objetivo de hurgar en la herida de un Celta metido en arenas movedizas e inclinar la balanza. El Mallorca se siente favorito y quiere sentar un principio de autoridad en el primer trayecto de la eliminatoria. El fútbol que ofreció en Pucela no ha convencido a nadie, pero los méritos que han contraido durante los últimos meses avalan su ambicioso tratado de intenciones.

Luis lo dejó claro pocas horas antes de viajar a Vigo y lo ha recordado a su llegada a la ciudad gallega: «En la Copa no se puede falar. En la Liga puedes recuperar la próxima jornada lo perdido en la anterior, pero no sucede así en este torneo». De nuevo con Finidi George y Samuel Eto'o en la expedición, el técnico balear tiene claro que armará a su equipo de gala con un único cambio. Javier Olaizola, en función de lo que ocurrió en el entrenamiento que realizó ayer el Mallorca en las instalaciones de la ciudad deportiva del Celta, iniciará el partido en el banquillo y será Armando quien ocupe el lateral derecho. Finidi volverá a ser titular, al igual que Samuel Eto'o. Jovan Stankovic se ha quedado fuera de la convocatoria y será Ibagaza quien se mueva por la banda izquierda.

En el otro bando, Víctor Fernández no ha dudado en reclamar algo más de crédito para su escuadra. El Celta no anda fino, pero su entrenador advirtió en rueda de prensa que «el Mallorca es un gran rival, creo que estamos ante una eliminatoria apasionante, pero creo que se ha dado en exceso la etiqueta de favorito al Mallorca. Personalmente no creo que sean favoritos».

Tras su mínima victoria en la Liga ante Osasuna, el Celta ha tomado algo de aire, pero su juego sigue sin convencer a nadie. Víctor Fernández también tirará de todo su armamento. El técnico sigue contando con el respaldo del consejo, aunque un naufragio en la Copa podría precipitar los acontecimientos.