Quinteros, Stankovic y Chichi Soler junto a un «hincha» improvisado. Foto: JOAN TORRES.

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El Mallorca salió ayer de compras. Mario Gómez decretó la primera jornada de descanso (sólo por la mañana) desde que la plantilla balear iniciara la concentración en Kössen. Sin embargo, tan sólo cuatro futbolistas (César Gálvez, Cordero, Djokaj y Stankovic) tuvieron fuerzas para abandonar el hotel de concentración y salir a comprar y a visitar la ciudad austríaca.

El grueso de futbolistas del conjunto mallorquinista prefirió descansar después de las duras sesiones a las que han sido sometidos por Claudio Bóveda, preparador físico del equipo. Sin embargo, por la tarde no hubo tregua. Mario Gómez y sus ayudantes diseñaron unas sesiones de gimnasio y de entrenamiento suave después del encuentro amistoso que el conjunto mallorquinista disputó el pasado domingo en Kössen ante el cuadro germano del SVG y que acabó con triunfo rojillo.

Por otra parte, destacar que uno de los focos de atención de la concentración está siendo Carlos Domínguez. El delantero, que había sonado como moneda de cambio en algunos traspasos (el de Giovanella) se ha convertido en la principal referencia ofensiva de los mallorquinistas en la primera parte del stage que están realizando en tierras austríacas.