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Un serbio en Croacia. Mal asunto en los tiempos que corren. Los que se apresuran a evitar comuniones político-deportivas merecen el elogio, pero también es una forma más de evadir la realidad. El fútbol, entre otras cosas, se ha convertido en la última forma de patriotismo y los estados en templos de adoración. Velko Paunovic, nacido en Strumica un 21 de agosto de 1.977, se ha desprendido de cualquier venda y ha exteriorizado sus miedos pocas horas antes de que el Mallorca se desplazara a Barazdin. El conflicto que ha ensangrentado los balcanes son el motivo.

Paunovic reconoció «estar algo nervioso» y subrayó que «me sentiría un poco más tranquilo con protección especial. Espero que primen las cuestiones deportivas y no de otra índole, pero desgraciadamente pasarán muchos años para que pueda jugarse con normalidad un partido entre serbios y croatas».

El jugador yugoslavo estuvo custodiado por dos guardespaldas a su llegada a Croacia. El club mallorquín y las autoridades croatas han preferido preservar la integridad física del joven centrocampista y evitar cualquier problema durante los días que el Real Mallorca esté hospedado en Varazdin, sobre todo a la hora de los traslados que debe efectuar el conjunto bermellón por la pequeña localidad croata.