El piloto mallorquín Lorenzo Fluxá, junto a su copiloto Xavi Ribas, en pleno recorrido de la primera etapa cronometrada del Dakar.

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El piloto mallorquín Lorenzo Fluxá junto a su copiloto Xavi Ribas, vivió ayer en primera persona la dureza del Dakar. En una primera etapa cronometrada marcada por los abandonos y los accidentes, Fluxá, que compite con su Toyota Land Cruiser de 1996 y con un equipo técnico 100 % mallorquín en la modalidad Classic, logró salvar todos los obstáculos para finalizar en la sexta plaza.

«Hemos acabado el primer día, que ha sido super difícil para todos. Este año el Dakar creo que será mucho más complicado que el año pasado. Ha habido coches volcados, yo me he encontrado con cuatro, y muchos abandonos. Para ser el primer día, los primeros 600 kilómetros, todos estos incidentes invitan a pensar en la dureza de esta prueba», apuntó Fluxá a este periódico al término de la primera jornada.

Después de completar los cuatro tramos, en los que se movió siempre entre los quince primeros en la clasificación provisional, insistió en la dureza de la etapa. «Hemos hecho 600 kilómetros, pero han parecido más de 1.000. Había mucha arena y muchas piedras y estamos satisfechos de nuestro trabajo». Tras la experiencia acumulada el año pasado, Fluxá y Ribas aspiran a ser uno de los referentes con el LJS Racing Team, que cuenta con el apoyo de Reserva Park, 226ERS o LJS Hoteles.

Carlos Sainz
Por otra parte, el piloto español Carlos Sainz (Audi) completó ayer una exhibición en la primera etapa del Rally Dakar 2024, que se disputa en Arabia Saudí hasta el 19 de enero, con una espectacular remontada que no pudo culminar en la recta final con un triunfo en coches que finalmente se llevó el belga debutante Guillaume de Mevius (Toyota), mientras que en motos venció el sudafricano Ross Branch, con la retirada tras una caída del español Tosha Schareina (Honda) como peor noticia de la jornada.
En un día duro y largo para los pilotos, con mucha piedra y terreno que obliga a demostrar toda su destreza a los pilotos, ‘El Matador’ emergió en los momentos claves, adelantando a unos 20 coches desde el inicio y a un ritmo alto. Sin embargo, De Mevius y su Toyota no decayeron al final y confirmaron al final su triunfo, quedando el madrileño a 1:44, aunque sacando minutos valiosos a sus teóricos rivales por el título.
Tras un incidente con un aficionado que obligó a retrasar el inicio de etapa, el sueco Mattias Ekström (Audi) salió lanzado y decidido a seguir arriba desde el primer momento. Pero una etapa imprevisible y un pinchazo fueron enemigos de uno de los candidatos, que pasó a más de 14 minutos de la cabeza. Aunque esta primera etapa sí fue una sangría para los grandes oponentes para Sainz por la victoria final. Stephane Peterhansel (Audi) se quedó a media hora del español, con Sébastien Loeb (Prodrive), a 21 y Nasser Al-Attiyah (Prodrive), a 23 y unos de los que más sufrió durante la etapa.
Por delante de estos, el español Nani Roma, en la decimocuarta posición, a 22:12 de la cabeza. Entre el resto de españoles, Laia Sanz (Astara) fue vigesimotercera, a casi media hora del vencedor; e Isidre Esteve (Repsol Toyota), vigesimoséptimo.
En motos, la durísima etapa llevó el nombre del botsuano Ross Branch (Hero), capaz de reinar en el caos de esta primera jornada. El actual líder de la general fue el primer en ayudar al español Tosha Schareina (Repsol Honda), pero sufrió una caída que le obligó a retirarse de la carrera.
Este domingo se disputará la segunda etapa de este Rally Dakar, con salida en Al Henakiyah y llegada en Al Duwadimi, una especial de 463 kilómetros.