«Todavía estamos inmersos en una temporada de Fórmula 1 y piensas que tienes que hacerlo mejor la segunda parte y tienes que seguir en forma y listo. Relax, pero no del todo», dijo en la rueda de prensa oficial este jueves, sobre el parón por vacaciones.
Sainz no puede estar tranquilo con un Ferrari que no saben explotar los domingos. «Toda la temporada hemos intentado diferentes cosas para entender esta nueva normativa, y ver dónde nos falta comparado con Red Bull y cómo podemos hacer el coche de 2024 más rápido, hemos pasado mucho tiempo en el simulador, y darle la vuelta a la temporada y poder estar en un mejor lugar de cara a la temporada que viene», afirmó.
«No es un secreto que nos ha faltado consistencia, es muy difícil predecir en qué circuito vamos a ser rápidos y en cuál no. El mejor ejemplo es lo que pasó en Hungría y Spa, al revés de lo que esperábamos. El coche siempre ofrece posibilidades en clasificación, clasificamos por encima de nuestro ritmo de carrera, y con una carrera limpia puedes mantener esa posición en el podio. Nos centramos en ser rápidos en carrera», añadió.
Por esa incertidumbre, el piloto madrileño confesó que tampoco sabe qué esperar de Zandvoort. «No lo sé, si miras la pista deberíamos ir bien, pero no lo sé. Por otro lado, la parrilla está muy apretada, estamos a una o dos décimas, y estar por encima o por debajo puede ser segundo u octavo», explicó.
«Todavía quedan 10 carreras para entender todo por completo. Desde los test de Barein vimos algo en nuestro coche que no entendíamos completamente. Identificamos la debilidad del coche pero es un coche muy exquisito, no entendemos por qué, pero hacemos un buen trabajo intentado averiguarlo. Tenemos teorías que estamos desarrollando que espero den sus frutos para el año que viene. Entendemos el problema básico, pero hay otros factores», zanjó.
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