El piloto español de MotoGP del equipo Yamaha, Jorge Lorenzo (dcha), y el estadounidense del NGM Mobile Forward Racing, Colin Edwards, asisten a la foto oficial de la temporada en el circuito Losail de Doha, Catar, el 4 de abril del 2013. | STRINGER

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El reto de la triple corona, la defensa del codiciado título de MotoGP que posee Jorge Lorenzo por partida doble (2010 y 2012) arranca este fin de semana en Losail (Catar), escenario del primer Gran Premio de un Campeonato del Mundo de motociclismo que presenta su edición más apasionante de los últimos años.

La marcha de Casey Stoner hace que Dani Pedrosa, el eterno aspirante; el debutante Marc Márquez y Valentino Rossi, en su regreso a Yamaha, sean los principales adversarios del mallorquín, exponente de Yamaha en un curso que le puede abrir las puertas de la leyenda.

La campaña en la que se establece un nuevo formato de clasificación, contando los cronos de las sesiones libres y en el que sólo los doce más rápidos lucharán por la ‘pole’, y la de la reducción del número de motores (de 6 a 5), calibrará el crecimiento de un evento que espera multiplicar su emoción con esta nueva normativa y la presencia de cuatro pilotos de primer nivel que escenificarán la lucha de las dos marcas de referencia: Yamaha y Honda.

Maratón

Por delante, dieciocho Grandes Premios (cuatro de ellos, Jerez, Montmeló, Aragón y Cheste, en suelo español) y la novedad del trazado de Austin (Texas), que comparece en la segunda cita del calendario.

Emoción máxima a la hora de destronar al campeón, un Jorge Lorenzo que ha mostrado su garra a lo largo de la pretemporada, al igual que las Yamaha. Pero Pedrosa sabe que puede estar ante una de sus últimas oportunidades para alcanzar el cetro.

La entrada en escena del mediático Marc Márquez en las filas del Repsol Honda supone un aliciente añadido, además de confirmar el inicio de la llegada de una nueva generación.

Álvaro Bautista (Go & Fun Honda Gresini), Aleix Espargaró (Power Electronics Aspar) y Héctor Barberá (Avintia Blusens) completan la ‘Armada’ española en una parilla con muchas caras nuevas.

Con 44 victorias, 23 en MotoGP, cuatro títulos mundiales, 98 podios y 51 ‘poles’, la hoja de servicios de Lorenzo le convierte en gran favorito. El portador del número 99 en el carenado de su Yamaha oficial es el rival a batir por todos en una larga singladura que plantea más problemas que en anteriores campañas.

El Lorenzo más metódico, reflexivo y próximo ya ha cumplido su sueño, y por partida doble. Valentino siempre tiene algo que decir. Pero por detrás, la presión de Honda a la hora de recuperar el reinado de MotoGP juega a favor del balear y supone un lastre especialmente para Pedrosa. Porque el futuro y su gran apuesta es una: Marc Márquez.