EN PRIMERA PERSONA

Xisco Jiménez, atrapado en Irán

El exjugador mallorquín está a la espera de poder salir de Irán, donde vivió «con incertidumbre» el ataque a Israel

El mallorquín Xisco Jiménez, en la torre Azadi de Teherán | image: X.J.

Carlos Montes de OcaPalma16/04/24 0:30Actualizado a las 07:40

Nunca imagino el exfutbolista mallorquín Xisco Jiménez Tejada la semana pasada, cuando emprendió un viaje de placer a Teherán para pasar unos días junto a su amigo Roberto Torres -jugador del Gol Gohar Sirjan de la Iran Pro League- que la escapada le iba a trasladar a una de las zonas más calientes del mundo en estos momentos. «Nos encontrábamos tranquilamente cenando el sábado por la noche y cuando acabamos de cenar, nos enteramos que Irán había atacado Israel...», comenta Xisco a Ultima Hora mientras espera coger un avión con destino a España una vez que se haya reabierto el aeropuerto internacional Imam Jomeini.

A pesar de que desde el sábado Irán está en el punto de mira tras el ataque sin precedentes a Israel que comprendió el lanzamiento de 170 drones, 30 misiles crucero y 120 misiles balísticos, Xisco se encuentra «bien». «Aquí hay tranquilidad absoluta, al menos eso es lo que se respira. Es verdad que nos pilló un poco de sorpresa todo lo que pasó. Obviamente te entra un poco el miedo y esa incertidumbre de no saber lo que va a pasar porque es una situación histórica que nunca había pasado. De repente, se cerraron los aeropuertos y no nos dejaron coger el vuelo que teníamos para volver a casa. Han sido unas 48 horas sobre todo de incertidumbre más que de miedo», apunta el calvianer.

Para Xisco, que recientemente anunció su retirada del fútbol tras abandonar la disciplina el Atlètic Baleares, reconoce que la vida en Teherán «no ha cambiado mucho desde que llegamos. Llevamos una semana aquí, que vinimos a ver jugar a Roberto Torres y estar unos días con él. Los días anteriores y los posteriores fueron tranquilos y quitando esa situación que se dio el sábado, todo ha ido perfecto. Esperamos que si todo va bien podamos coger el avión y regresar a España», apuntaba el exfutbolista mallorquín, de 37 años.

Xisco aceptó la invitación de Roberto Torres, con el que guarda una buena relación tras coincidir en el Club Atlético Osasuna, y junto a Oier Sanjurjo no dudó en hacer las maletas para pasar unos días en Teherán. El sábado por la noche, mientras Irán atacaba a Israel con más de 300 drones y misiles, Xisco se encontraba cenando con Roberto, Oier y Massoud, todos excompañeros suyos en las filas del conjunto navarro. Es de esperar que en las próximas horas Xisco Jiménez regrese a España y abandone un país que está centralizando la atención del mundo entero.