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Radomir Antic dio muestras de confianza en reconducir el rumbo del equipo en su presentación como nuevo técnico del Barcelona, especialmente cuando confirmó que buena parte de su salario sólo la cobrará si se proclama campeón de la Liga de Campeones o logra la clasificación para la próxima edición del torneo. Joan Gaspart, presidente del club, fue el encargado de anunciar esta cláusula que figura en el contrato del yugoslavo, en el que, por contra, no se incluye una renovación obligada más allá del 30 de junio si Antic alcanza algún objetivo concreto.

Gaspart, horas después de que el equipo encajara una nueva derrota que le sitúa al borde de los puestos de descenso, programó una puesta en escena en la que el nuevo entrenador compareció acompañado de Carles Rexach, el secretario técnico, y respaldado por el grueso de la junta directiva.

Radomir Antic dijo saber «qué significa el Barcelona para Cataluña y para sus socios» y prometió «dedicación para salir de esta crisis. Para mí es un gran reto», manifestó Antic, quien concretó los objetivos en «ganar todo lo que se pueda, incluida la Copa de Cataluña».

El yugoslavo, sin embargo, admitió en todo momento la difícil situación en la que se encuentra el Barcelona y explicó que Joan Gaspart ya se la había expuesto con sinceridad, pero que no le asustó, para añadir que tiene «ilusión». Para Antic, la crisis del Barcelona ha venido originada especialmente por las numerosas bajas en puestos clave que ha sufrido la plantilla y por la dinámica en la que ha entrado últimamente, «en la que el deseo de ganar está por encima de otras características».

El nuevo técnico barcelonista espera que Juan Pablo Sorín, el fichaje de invierno de su equipo, sea «un buen refuerzo», al tiempo que reconoció que rechazó las posibles incorporaciones propuestas por el club, sobre todo en la posición de delantero centro, porque confía en Patrick Kluivert, Javier Saviola, Dani García y Luis Enrique, cuando este último se recupere de la lesión que sufre.

«Dentro de la plantilla hay suficientes recursos», manifestó el yugoslavo, quien rehusó comparaciones entre el Barcelona actual y el Atlético de Madrid que, con él en el banquillo, bajó a Segunda División.

Las diferencias, según Radomir Antic, radican en que llegó «tarde» al club madrileño, en el que «la situación era atípica», mientras que, ahora, está seguro de que «todas las fuerzas estarán unidas en favor del equipo», concluyó el preparador serbio.

Joan Gaspart, presidente del Barcelona, se declaró «enfermo de UVI y al borde de la extremaunción», después de que todas las críticas por la situación del equipo en la Liga, en la que se encuentra al borde de los puestos de descenso, hayan convergido en el máximo rector del club. «Siento mucha vergüenza», manifestó Gaspart, quien de inmediato dijo tener también una carga de responsabilidad que le ha llevado a fichar a Radomir Antic como nuevo técnico. «Es esta junta la que tiene que sacar esto adelante», precisó Joan Gaspart, quien manifestó: «Los barcelonistas estaríamos mejor encerrados en casa, pero yo estoy aquí dando la cara para salir de una situación que el Barcelona no se merece». Gaspart, en todo caso, dijo tener «la conciencia tranquila», aunque reconoció que él y su junta se habían equivocado. «Estoy triste por los demás», añadió. El dirigente azulgrana relató con pelos y señales la situación personal que vive: «Para mí, el Barcelona es una religión, tengo una pasión desmesurada y por eso estoy como estoy, en un estado que no se lo deseo ni a mi peor enemigo, mientras que otra persona más normal estaría pensando que esto sólo es fútbol. El presidente y su junta son optimistas, dentro de la coherencia, y conscientes de que las cosas pueden cambiar rápidamente, así que nadie piensa en algo que no sea en ganar la Champions y en empezar a subir puestos en la Liga», aseguró.