El jugador polaco Robert Lewandowski (i) marca de cabeza el 1-0 contra Grecia. | Efe

TW
1

Polonia 1 - 1 Grecia

Polonia: Szczesny; Piszczek, Wasilewski, Perquis, Boenisch; Blaszczykowski, Polanski, Murawski, Rybus (Tyton, min. 70); Obraniak, Lewandowski.

Grecia: Chalkias; Torosidis, A. Papadopoulos (K. Papadopoulos, min. 37), Papastathopoulos, Holebas; Maniatis, Katsouranis, Karagounis; Ninis (Salpingidis, min. 46), Gekas (Fortounis, min. 68), Samaras.

Goles: 1-0, min. 17: Lewandowski. 1-1, min. 51: Salpingidis.

Árbitro: Carlos Velasco Carballo (ESP). Amonestó a Papastathopoulos (min. 35), Holebas (min. 47), Karagounis (min. 54) por parte de Grecia. Expulsó a Szczesny por roja directa (min. 69) por parte de Polonia; y a Papastathopoulos por doble amonestación (min. 44) por parte de Grecia

La selección de Polonia no ha podido pasar del empate (1-1) ante Grecia en el partido inaugural de 'su' Eurocopa que organiza junto a Ucrania, tras no saber aprovechar la superioridad numérica con la que actuó sobre casi una hora de partido, ante un rival correoso que suma así su primer punto en el grupo A.

El ímpetu con que el estadio Nacional de Varsovia y sus once representantes sobre el terreno de juego entonaban los acordes del himno polaco hizo presagiar una salida en tromba del conjunto de Franciszek Smuda. En el minuto 17, Lewandowski materializó en gol las múltiples ocasiones de las que gozaron los locales.

Una jugada de combinación y velocidad por la banda derecha del ataque polaco, terminó con un centro que Chalkias intentó despejar sin suerte, quedando a media salida, lo que facilitó el remate a placer del de Borussia Dortmund, que adelantaba (1-0) merecidamente a su conjunto para deleite de los aficionados.

El tanto apaciguó los ánimos locales y Grecia comenzó a acercarse al área de Szczesny, aunque siquiera firmaron un tiro entre los tres palos. El partido vivía su momento más igualado cuando el árbitro español Velasco Carballo mostró erróneamente la segunda cartulina amarilla a Papastathopoulos por derribar a Obraniak, quien llegaba desequilibrado a la jugada tras un resbalón.

La expulsión fue lo más destacado del partido hasta el descanso. En la reanudación, Grecia realizó un calco de la jugada que originó el gol de Polonia. Esta vez, en lugar de errar el portero en la salida, fue un zaguero el que se entrometió en su carrera y se chocó con Szczesny para dejar un balón muerto que la punta de la bota de Salpingidis introdujo en las mallas para empatar (1-1) el envite.

A partir de ahí, el encuentro se convirtió en un 'correcalles' donde ninguno de los equipos se mostró capaz de dominar el esférico. En un pelotazo a la carrera, Salpingidis fue derribado por Szczesny cuando se encontraba en posición franca para anotar. La jugada se saldó con la expulsión del guardameta y con una pena máxima que el recién ingresado Tyton detuvo a Karagounis.

La oportunidad marrada por una Grecia que acumulaba demasiados minutos con inferioridad numérica, no frenó a los helenos. De hecho, unos escasos centímetros de posición antirreglamentaria de Fortounis propició que Velasco Carballo anulase un tanto de Salpingidis. Mientras, Polonia se mostraba como un equipo impotente e incapaz de siquiera generar peligro.

En la recta final del encuentro, ni Smuda ni Santos buscaron una solución en sus banquillos, por lo que ningún futbolista tuvo la oportunidad de agitar un partido que transcurría por los cauces que Grecia quería. De este modo, el partido estaba destinado a acabar en empate a uno, como finalmente sucedió, para decepción de los aficionados polacos que se citaron en Varsovia.