El capitán de la selección española de baloncesto, Juan Carlos Navarro, celebra la medalla de bronce | Efe - Juan Carlos Hidalgo

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El base español Juan Carlos Navarro se mostró emocionado tras disputar su último encuentro con la selección nacional, en el que logró el bronce al derrotar (93-85) a Rusia en el partido por el tercer puesto, afirmando que el equipo se encuentra en buenas manos de «jóvenes que vienen con fuerza» y recordando los mejores momentos, entre los que destacó el Mundial ganado en 2006.

«Me quedo con los buenos momentos. Ha habido más buenos momentos que malos. Me podría quedar con el Mundial y esa semana fantástica en Lituania. Me llevo muchos amigos y compañeros tanto en la pista como fuera. Los fisios, los compañeros, el staff...», respondió tras el partido en declaraciones a Cuatro que recoge Europa Press.

Para Navarro ha sido «un placer» estar con la selección y defender sus colores. «Que estén tranquilos porque la gente joven viene con mucha fuerza y, aunque tengan difícil igualar todo lo conseguido, seguro que nos darán muchas alegrías», añadió.

Tras conquistar su décima presea con el combinado nacional, Navarro reconoció el sabor agridulce del bronce, antes de hacer hincapié en la fuerza de un grupo que le ha «hecho ganar otra medalla» y que acumula seis Eurobaskets consecutivos sin bajar del podio.

«Ha sido un día y medio raro. He recibido muchos mensajes y estoy muy contento. Me habría gustado decirlo antes de la final y probar otra medalla, pero el equipo se ha rehecho bien y estoy contento porque me han hecho ganar otra medalla», explicó.

De esta manera, el catalán cierra una etapa repleta de éxitos y que le ha llevado a convertirse en el jugador con más partidos disputados con la selección, superando los 250 en unos diecisiete años de trayectoria desde su debut de los que aseguró sentirse «muy contento».

«Estoy intentando aguantar sin emocionarme. Pasan muchas cosas por la cabeza. Piensas o recibes mensajes que te emocionan, de la familia y de mis hijas... Es para estar contento de estos diecisiete años», respondió emocionado.

«Les echaré mucho de menos, sin duda. Era como un ritual estar aquí con ellos, pero es ley de vida. Son cosas que tiene que pasar y creo que he decidido bien el momento», concluyó.