En una nota de prensa, el Instituto Armado ha explicado este jueves que la operación se ha centrado en los puestos de compra de aceitunas ubicados en la Sierra Sur sevillana. En ellos, se detectó la presencia de personas que transportaban aceitunas «amparadas con documentos de acompañamiento del fruto (DAT)».
Estos documentos levantaron las sospechas de los agentes en relación al origen de los mismos, por lo que se iniciaron las investigaciones correspondientes contando con la colaboración «imprescindible» de la Delegación Territorial de Agricultura de Sevilla. Ante las «sospechas» de que pudiera haber «algún tipo de connivencia» entre las personas que entregaban los portes de aceitunas con las responsables de recogerlas en los centros de compra, se centraron las investigaciones tanto en los centros de compra de aceitunas como en las almazaras de destino.
Como resultado de dichas actuaciones, «se obtuvieron indicios suficientes» que acreditaron la comisión de «numerosos delitos de falsedad» en los documentos públicos utilizados en las actividades desarrolladas por las personas responsables de los centros de compra de aceitunas, procediéndose a la investigación de siete personas como presuntos autores de supuestos delitos de falsedad en documento público, así como a demostrar que 553.849 kilos de aceitunas fueron entregadas y molturadas con el amparo de «documentación falseada».
Además de remitir las actuaciones a los Juzgados de instrucción de Osuna y Estepa para determinar las responsabilidades penales que pudieran derivarse de los hechos, se ha elaborado un «extenso informe» que ha sido dirigido a la Delegación Territorial de Agricultura en Sevilla con el fin de determinar si además pudiera haberlas administrativas en relación a la trazabilidad alimentaria del producto.
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