Una primera fase ha de enlazar con la rotonda de la MA-4032. | R.P.F.

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El Ajuntament de Sant Llorenç ha dado el primer paso para la construcción del carril bici y vial cívico del Camí de Son Moro que conectará la zona de playa y el carril bici de la zona marítima con la vía verde. Se trata de un proyecto que fue redactado en mayo de 2019. Ahora se ha iniciado el procedimiento de expropiación y declaración de urgencia para la ejecución de esta nueva infraestructura. Son 33 las fincas afectadas con una superficie total de expropiación de 8.732 metros cuadrados. El importe total asciende a 173.906 euros.El pasado 7 de mayo salió a información pública la relación de bienes afectados.

Así ya se ha iniciado este procedimiento de expropiaciones que se alargará por espacio de meses. La idea es poder obtener una financiación de los fondos europeos para llevar a cabo esta actuación que tiene un presupuesto de alrededor de 2,5 millones de euros. La propuesta es crear un vial cívico desde la calle Baladres hasta la rotonda de la MA-4023. Previamente el Ajuntament ya modificó las normas subsidiarias para poder crear esta infraestructura que favorece una movilidad no contaminante y se impulsa el uso de la bicicleta.

El alcalde, Jaume Soler, ha destacado que se hará una primera fase con una opción de trazado comprendió entre la calle Baladres y la rotonda en la intersección del camí de son Moro con la Ma-4023. Posteriormente, en otra fase, se facilitará la conexión con la vía verde. Según el proyecto se realizará un paseo mixto peatonal y para bicicletas implicando la demolición de aceras y de parte del pavimento existentes. Además se dotará de alumbrado público y se creará un parterre longitudinal para la plantación de arbolado y arbustos que consigan una mejor integración con el entorno ambiental. Se trata de actuaciones que contribuyen a incrementar la seguridad viaria y a la vez apuestan por la desestacionalización y por un turismo sostenible que promueve el uso de la bicicleta.

Esta intervención forma parte de una reivindicación antigua y que ya fue contemplado en el plan de movilidad de la zona costera, redactado en 2016. En este documento se fijan una serie de conclusiones entre las que está como prioridad favorecer la movilidad en bicicleta no solo entre los diversos barrios costeros sino permitir que los residentes y visitantes tengan un acceso seguro hasta la vía verde.

Entre las propuestas de este plan está aumentar la red de carriles para bicicletas que no solo discurren por los paseos costeros sino que se introducen en la trama urbana y llegan a las zonas residenciales para promover la movilidad no motorizada de los residentes. El objetivo final de este proyecto es modernizar y mejorar el producto turístico y la movilidad de la gente.