Confirmado por el Estatuto de los Trabajadores: tienes derecho a 4 días libres, pagados y sin justificarlos a tu empresa, según el artículo 37

Conoce qué casos familiares y emergencias médicas en España permiten esta ausencia retribuida

Dicho permiso no puede usarse de manera arbitraria | Foto: Freepik

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En España, muchos trabajadores desconocen que cuentan con un derecho legal para ausentarse hasta cuatro días laborables anuales sin necesidad de autorización previa y sin que estas horas se descuenten del salario. Este permiso, recogido en el Estatuto de los Trabajadores, es fundamental para atender emergencias familiares graves con compensación económica garantizada.

Es habitual que surjan imprevistos vinculados a la salud de nuestros allegados o a situaciones urgentes en el entorno familiar. Por ello, el reconocimiento y correcto uso de este derecho evita conflictos laborales y garantiza la seguridad laboral y personal del empleado.

Este permiso especial no es un favor de la empresa, sino un derecho amparado por la ley que protege al trabajador cuando debe ausentarse por motivos de fuerza mayor relacionados con enfermedades o accidentes graves que requieren su presencia inmediata.

Permisos laborales por causas familiares urgentes

El artículo 37.9 del Estatuto de los Trabajadores en España establece que la persona empleada puede ausentarse sin autorización previa cuando se presenta una situación de fuerza mayor en su entorno familiar cercano o con quienes convive. Esta ausencia puede disfrutarse hasta por un máximo de cuatro días laborables al año, y no se limita a horas sueltas sino a jornadas completas según la jornada pactada.

El permiso se activa ante casos inaplazables. Por ejemplo, cuando un hijo sufre una enfermedad repentina o un familiar directo tiene un accidente que pone en riesgo su integridad y exige acompañamiento inmediato. La ley cubre a familiares hasta segundo grado de consanguinidad o afinidad como abuelos, hermanos o nietos, así como personas con las que se conviva y sobre las que se tenga responsabilidad directa de cuidado o dependencia.

Es importante subrayar que no es válido para citas médicas programadas ni para cuidados planificados. La motivación debe ser un evento inesperado y urgente, que requiera la presencia inmediata del trabajador y no pueda diferirse.

Condiciones y limitaciones del permiso retribuido

La iniciativa no solo permite la ausencia laboral sino que el tiempo ausente debe ser pagado íntegramente como si se hubiera trabajado. Esto representa una seguridad económica para quienes atraviesan situaciones familiares complicadas. Eso sí, esta cualidad de permiso retribuido está sujeta a lo que establezca el convenio colectivo o los acuerdos entre empresa y representantes sindicales.

Tras su disfrute, es necesario aportar una justificación documental que pruebe la contingencia para la que se activó el permiso, como un informe médico o certificado de hospitalización. Esta documentación respalda el uso correcto del derecho y evita posibles disputas laborales.

Es muy relevante que los trabajadores tengan presente que este permiso no puede ser utilizado arbitrariamente para superar situaciones cotidianas sin urgencia ni gravedad. Su reserva estratégica junto a otros permisos ayuda a afrontar situaciones inesperadas sin perder retribución ni puesto de trabajo.