El porche estilo claustro, con sus arcos sustentados por columnas de piedra, resulta idílico para disfrutar de la vida al aire libre. | Porta-Mallorquina

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Construir una gran casa en el siglo XXI no tiene por qué estar sujeto a los cánones del diseño contemporáneo. El clasicismo puede reinar también en estos tiempos. Eso sí, a toda vivienda edificada en la actualidad se le exigen unos estándares de calidad, diseño, espacio y confort que antaño no existían.

Por eso esta gran casa de campo situada en Bunyola aúna lo mejor de los dos mundos: un estilo clásico imperecedero y unas calidades actuales más que notables. Su belleza radica en la armonía de la simetría, con una construcción en forma de U que se abre a la inmensa piscina de agua salada de sesenta metros cuadrados, junto a la zona de comedor exterior y de solarium.

El estilo mallorquín campestre, con sus persianas verdes, se ve realzado con toques de aristocrática distinción gracias a la columnata que cierra el porche, un lugar perfecto para la vida social y familiar al aire libre. En la planta baja encontramos el salón-comedor, la cocina, un despacho y un dormitorio con baño en suite. Arriba, otros tres dormitorios con baño en suite y dos de ellos con vestidor. En el sótano, enorme, hay sitio para todo lo que se desee.

Interiores

Salón: Un coqueto rincón de estar con algunas antigüedades de estilo rústico.

Comedor: Intensa luminosidad gracias a la pared de cristal que se abre a la ‘logia’ de arcos y columnas.

Cocina: Blanca, en forma de L y con un práctico office, está diseñada en estilo rústico contemporáneo.

Dormitorios: Amplitud y mucha luz en los cuatro dormitorios de la casa, que cuentan con baño en suite.

Baños: El estilo rústico predomina en el diseño interior de los cuatro cuartos de baño de la casa.

Exteriores: El porche de las columnas constituye un entorno perfecto para la vida familiar al aire libre.

El alzado
Superficie: 435 metros cuadrados
Parcela: 22.000 metros cuadrados
Lugar: Bunyola
Precio: 1.950.000 €
¿Qué la hace diferente?: Sus generosas dimensiones, el enorme terreno que la rodea y su ubicación, en el verde campo bunyolí, hacen de esta casa una opción idílica para una familia grande o para disfrutar de los fines de semana.
Más información: www.porta-mallorquina.es