Francina Armengol, el pasado jueves, en el debate de la política insular del Consell. | Pere Bota

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El Consell de Mallorca se prepara para afrontar un 2011 muy difícil y marcado por «graves problemas financieros». El diganóstico es del responsable de Hisenda de la institución, el conseller Antoni Alemany que situó el recorte previsible en «50 millones» de euros. Lo que desmintió Alemany fue algo que había expresado poco antes el portavoz del PP, Jaume Font: «Esta institución no tiene ni un euro y si no tomamos medidas no llegamos a fin de año».
El Consell, que en los próximos días aprobará la liquidación del presupuesto de 2009, previsiblemente con superávit, comenzará este mismo año a recortar gastos para, en palabras de Alemany, «hacer hucha» ante lo que vendrá en 2011. Los presupuestos del próximo año, salvo que el Consell logre esquivar la prohibición expresa prevista en las medidas de ajuste de Zapatero, se aprobarán no podrán contar con el 'colchón' del endeudamiento. Y todo eso repercutirá en todas las áreas, también en la elaboración del Plan de Obras y Servicios que sirve para financiar proyectos de los ayuntamientos. El recorte de los sueldos al funcionariado se aprobará el día 1.
Menos cargos
El Consell de Mallorca empezó el año con su presupuesto más elevado, de 436 millones si se incluyen los institutos públicos.
La idea del equipo de gobierno del Consell, formado por PSIB y Bloc, es pactar «los ajustes que habrá que hacer en los próximos meses» con UM y PP. Según el 'popular' Font, debería crearse una comisión específica. La descripción que Font hizo del estado de cuentas de la primera institución insular, fue aún más dramática que la reconocida por Alemany. Font prevé un descenso del 35% en las cuentas de la institución y aventura que también este año el Consell podría terminar con resultado negativo. Alemany considera que, incluso con los recortes que haya que poner en marcha este año, los resultados serán «equilibrados».
Jaume Font, en línea con su intervención en el debate de política general que se celebró el pasado jueves, afirmó que «esto no funcionará si no ponemos el dedo en la llaga» y se afronta el debate sobre la necesidad de «redimensionar» la institución. . Los populares son partidarios de eliminar altos cargos, trabajos y estudios que no sean necesarios y concretar cuáles son las actuaciones prioritarias.
«Gobernar supone adoptar decisiones: si la presidenta, Francina Armengol, no las adopta, esta casa no llega a fin de año, incluso a antes», dijo Font. El portavoz 'popular' se preguntó «qué hace el Consell de Mallorca con el polideportivo de Sant Ferran». Font es de la opinión que debería ser traspasado al Ajuntament de Palma ya que, «es municipal».
El PP defenderá en el pleno del uno de julio una serie de propuestas de resolución derivadas del debate de política general del Consel, entre ellas que se paralice el proceso de transferencias hasta que se haya decidido «cuáles podemos gestionar nosotros y cuáles el Consell.
Font, pese a que el PP no apoyara los recortes propuestos el día anterior por Antich en el Parlament, afirmó que sí estaba dispuesto a hacer los posible para llegar a acuerdos ante la crisis económica del Consell.